No hay consuelo para Rony Vargas. El locutor sanjuanino llora la partida de su amigo de hace 50 años, Mario Pereyra que falleció este domingo con coronavirus. En redes sociales, la emisora que ambos apuntalaron y convirtieron en una cadena federal Cadena 3 transmitió las palabras del sanjuanino hacia otro coterráneo con el que compartió todo.
"Abrazo compadre. Hace muchos años dos jóvenes se reunieron en una heladería en la calle Mendoza 169 de #SanJuan y pensaron que podían trabajar juntos. Pasaron los años, no firmaron nada y es allí cuando a Mario se le ocurrió decir: “No firmemos nada, esto será hasta que la vida nos separe”. Compadre, pasaron muchos años, te fuiste. Y te digo... esperame que volveremos. Y nuevamente seremos dos. Te abrazo compadre", fueron las palabras de Rony, que está conmovido por la muerte de Pereyra y recibió miles de muestras de afecto en este duro momento.
Más temprano, fue uno de sus hijos quién se expresó también en las redes. "Se ha ido el Tío Mario, como los Hermanos Vargas le decimos desde que nacimos. Se fue un hombre transparente, que trabajó sin pausas, ni feriados desde muy jovencito, abrazó la radiofonía leal a su amigo Rony, toda su vida. Siempre receptivo a las ideas y promotor de todo aquello que le servia a su querida, cuidada y respetada audiencia. Gracias Tío Mario, gracias por todo", posteó Juanjo Vargas que es un reconocido especialista, asesor, teórico y conferencista en comunicación.
"Mario fue durante 35 años líder en audiencia y uno de los creadores de la radio más federal del país, que diseñó y construyó con su impronta", recuerda Cadena 3, en un homenaje al conductor sanjuanino según La Voz.
Mario Pereyra luchaba contra los embates del coronavirus y hacía 10 días estaba internado junto a su esposa Estela en el Instituto Cardiológico de la provincia mediterránea. Tras un parte médico que el sábado hablaba de su estabilidad en el complicado cuadro, llegó lo inesperadamente doloroso. Falleció esta madrugada a los 77 años.
El locutor había nacido el 20 de julio del año 1943. Sus restos serán cremados en un ceremonia estrictamente privada y familiar. No habrá velorio.
