Semana Santa es históricamente la fecha en la que más se consume pescado en San Juan. Impulsados por la fe cristiana, el Viernes Santo se convierte en el día con más movimiento en el rubro y que permite repuntar las ventas especialmente en las pescaderías. Sin embargo en esta provincia año a año se viene dando una tendencia que impulsa mayores controles de Salud Pública: la venta de pescado en verdulerías y carnicerías.
Ante esto, el titular de Medicina Sanitaria, Roque Elizondo, explicó que los controles se han fortalecido incluidos también con los puestos de venta ambulante de pescado. "Hasta ahora no hemos tenido ningún problema. Hemos recorrido el Gran San Juan y Jachal y no hemos realizado decomisos, está todo ordenado", comenzó alentando.
Salud Pública cuenta con equipos de profesionales que recorren las calles desde el viernes pasado controlando cada punto de venta y ante los mínimos errores advierten los cuidados que se deben tener para evitar aplicar multas e incluso la clausura de algún local.
"Es una campaña que se viene realizando hace muchos años y la gene entendió cuáles son las enfermedades transmitidas por el pescado. Esto sucedía en otras circunstancias. Este viernes habrán inspectores recorriendo toda la provincia, sobre todo los vendedores ocasionales, acá es donde podemos tener inconvenientes porque exponen el pescado al sol, no se conserva la cadena de frío y puede traer problemas", señaló.
Previo a Semana Santa, la cartera sanitaria brindó un curso de manipulación de alimentos y puntualmente sobre manipulación de pescado. Allí han asistido verduleros y carniceros que "han entendido los cuidados que hay que aplicar para la venta". "Toda la semana desde el lunes hasta ayer han habido personas que han retirado el carnet, y muchas personas han recurrido para estar habilitados para la venta de pescado aunque no sea su rubro", explicó Elizondo.
El carnet de manipulador tiene duración de 3 años con validación nacional lo que permite trabajar con el mismo en otras provincias del país.
En Capital
La Capital de San Juan es, sin dudas, el departamento que ofrece una mayor cantidad de puntos de venta de pescado. Atento a esto, desde la dirección General de Inspecciones Municipales, fortalecieron los controles con el fin de actuar ante cualquier irregularidad.
En forma coordinada con Salud Pública de la provincia, el área de Bromatología de la municipalidad de la Capital encara los controles en toda la jurisdicción de este departamento. Los hacen en locales mayoristas, minoristas, venta ambulante y en todas las bocas de expendio de pescado para evitar complicaciones de la salud.
"Se va a estos lugares de venta para asegurar que la población esté asegurada en salud. Esto lo hacemos todos los años pero también en forma periódica. Los comercios tienen buena practica en manipulación, conservación de alimentos y no hemos tenido inconvenientes pero sí hemos tenido que hacer observaciones y recomendación", aclaró Rogelio Cerdera a cargo del área
"Abordamos los característicos y clásicos, pero no sólo nos abocamos a las pequeñas bocas de expendio. Se verifica y controla todo. No hemos encontrado anormalidades", subrayó.
