Orgullo

Evaristo Elizondo, la historia del vallisto que movilizó a los vecinos

A un año de la muerte del querido artesano, le realizaron un conmovedor homenaje al maestro tallador.
miércoles, 22 de febrero de 2023 11:39
miércoles, 22 de febrero de 2023 11:39

Evaristo Elizondo fue un hombre que dejó huella en miles de hogares. Es que durante más de 50 años se dedicó a tallar la madera para crear todo tipo de objetos que iban desde cucharas hasta estribos y que se vendían incluso de forma internacional.  A un año de su muerte, vecinos decidieron homenajearlo poniéndole su nombre a una calle.

El 21 de febrero del 2022 falleció de forma física, pero comenzó a engrandecerse su leyenda. "Ya no se escuchará el golpeteo del hacha en esa casa del camino viejo de La Majadita", se lamentaba la Municipalidad de Valle Fértil en las redes sociales, el día de su muerte.

Nació en 1934 y toda su vida vivió a 7 kilómetros de la villa cabecera de Valle Fértil por lo que no había vallisto que no lo conociese. Tenía un corazón enorme que no solo le permitía darle forma a la madera sino también criar a un nieto como su propio hijo tal y como hizo con Fabián.

Evaristo Elizondo intentó compartir sus secretos con sus hijos y nietos, ya que él mismo aprendió el oficio de artesano de su propio abuelo.

Desde pequeño se crió con su abuelo a quien le decía “papá” y de quien aprendió algunas tareas básicas del oficio. “Él fue nacido y criado en La Majadita. Su mamá se llamaba Rufina y nunca supo quién fue su padre. Yo me crié con él desde muy chico, siempre ayudándole con las artesanías ya que nos enseñó mucho”, aseguró Fabián en diálogo con Diario La Provincia SJ.

El chañar, el retamo y el algarrobo caían bajo sus manos y se transformaban en obras que incluso fueron premiadas, en el 2011 en La Rural de Palermo, en Buenos Aires. Sin embargo, aquellos que vivieron en su casa que quedaba a la par del río, tienen miles de anécdotas con olor a aserrín.

“A veces íbamos al campo con él y con mi madre a buscar madera en un carrito tirado por dos burros. Él cortaba a hacha y nosotros le ayudábamos con la corvina que es como un serrucho que se utiliza a dos manos. Tengo muy lindos recuerdos porque nos solíamos quedar un día en el campo y volver al día siguiente a nuestra casa”, recordó Fabián.

Su obra fue tan prolífera que continúa estando presente hasta en las pequeñas cosas. “Lo sigo encontrando en detalles, en sus artesanías, al ver en algunos puestos estribos hechos por él, una cuchara de madera, una frutera, una bandeja, una batea, hasta un cenicero hecho por sus manos me traen recuerdos”, aseguró Elizondo.

Vecinos del Barrio Margarita Ferrá de Bartol estuvieron trabajando en la cartelería de la zona e incluyeron el nombre del maestro tallador.

A un año del aniversario de su muerte, vecinos del Barrio Margarita Ferrá de Bartol quisieron dejar su nombre en la eternidad. Para ello, bautizaron una de sus calles con el nombre "Evaristo Elizondo", que coincidentemente se cruza con la de otro grande "Saúl Quiroga".

Así quedó el cartel que anuncia el nombre de la calle en homenaje al artesano.

“Fueron los mismos vecinos, a través de una comisión del barrio se contactaron con nosotros preguntándonos si ellos podían ponerle el nombre de mi papá a una calle y todos estamos muy contentos por el homenaje. Para mí es un gran orgullo”, sentenció Fabián.

Comentarios