Alrededor del 2009 un grupo de amigos y laburantes con distintos oficios tuvieron la idea de asociarse. Querían brindar un servicio integral que comprende desde alguien que levanta paredes, que hace las instalaciones eléctricas, la plomería, la pintura e incluso hasta alguien que se dedica a forjar las rejas y ventanas. Eso fue la base de lo que dos años después se convertiría legalmente en la Cooperativa Cóndor Andino, y que ahora gracias a un proyecto de la Secretaría de Ciencia y Técnica, fabricará una máquina para producir elementos metalúrgicos.
"Éramos un grupo de amigos que veíamos que en conjunto podíamos brindarle una solución más integral al cliente. Si vos en tu casa querés hacer una ampliación, al final terminás tratando con cinco o seis personas: el albañil, el electricista, el herrero. Nuestra idea era simplificarle la vida al cliente, dentro de nuestras capacidades, oficios y habilidades, nuclearnos y brindar una solución integral", contó Víctor Pérez en diálogo con Diario La Provincia SJ.
A partir del 2011 lograron la personería jurídica y se constituyeron oficialmente en la Cooperativa Cóndor Andino que actualmente funciona en el Polo Cooperativo de Rawson. "Cuando tomamos ese camino vimos que para que nos contratara una empresa o el Estado teníamos que poder facturar, sumado a las necesidades normales de los laburantes como aportes y obra social, pensando en el futuro. Así que vimos la posibilidad de nuclearnos en una cooperativa que era la opción jurídica que más encajaba con nuestra idiosincrasia. Fue un mundo nuevo, porque cuando obtuvimos la matrícula nos dimos cuenta de que era como un DNI para el bebé. Después necesitás vacunarlo, vestirlo, etc. que en nuestro caso fue todo el tema de impuestos, asambleas, balances", agregó.
En qué trabaja Cóndor Andino
Realizan todo tipo de trabajos para particulares y privados y que se pueden ver en la página: www.condorandinoweb.com . "Somos una cooperativa de trabajo que nos dedicamos a construcción, obras civiles, públicas y privadas y también hacemos metalúrgica. Estamos trabajando desde el 2011 y todos vivimos de la cooperativa. Nos dedicamos a construir una casita, un techo, una galería, una reja, trabajamos con el municipio, etc", explicitó Pérez.
Como en muchos otros sectores, el coronavirus los golpeó intensamente y les hizo abrir los ojos sobre la necesidad de diversificarse. "Con la pandemia no lo pasamos muy bien y por eso empezamos a ver de producir algo. Por eso empezamos a ver la posibilidad de hacer herrajes. Desde que comenzamos, hemos ido adquiriendo máquinas de metalurgia, pero nos faltaba una máquina que es una punzadora cizalla. Es una maquinaria básica, punza, es decir que hace agujeritos que dependiendo la matriz pueden ser redondos, ovalados, cuadrados, etc. y cizalla, quiere decir que corta".
Adquirirla era imposible, así que pensaron en que si tenían la capacidad para hacerla ellos mismos, solo necesitaban ayuda para adquirir los materiales. "En el mercado está a un precio inalcanzable para nosotros. Por eso presentamos un proyecto en la Secretaría de Ciencia y Técnica para crearla nosotros y así ahorrarnos mucho dinero, sobre todo porque nosotros ponemos la mano de obra. La vamos a desarrollar por completo, calcularla, diseñarla y hacerla. Ya nos depositaron todo el dinero y estamos a la espera de que nos llegue el sistema hidráulico que lo hemos comprado en Buenos Aires", anticipó.
"Tenemos nuestro taller en el Polo Cooperativo de Rawson, donde era el ex gremio de los carteros. Producto de nuestro trabajo hicimos toda la infraestructura y compramos máquinas que nos han posibilitado el ir creciendo. Actualmente viven 16 familias de la Cooperativa y es todo un desafío el ser obrero y ser patrón. Hacemos un laburo pensando en el día de mañana. Gracias a Dios vivimos de la cooperativa y gracias a Ciencia y Técnica vamos a instalar una rama que nosotros no tenemos que es la producción concreta de algo", sentenció Víctor.
