Dicen que quien reconoce sus errores se fortalece como persona, aunque es un paso que no todos se animan a dar. Mejor es hacerse al costado. Pero eso no ocurrió en Calingasta, precisamente en el Paseo La Calle en el casco histórico de la localidad de Tamberías.
Un adolescente escribió su nombre en la madera de una de las mesas, que lucen renovadas tras una acción del municipio de poner en valor edificios históricos. Para el periodista de Radio Manantial esto no pasó desapercibido y lo rescató en un posteo en las redes sociales junto a una foto de cómo lucía la madera tallada. Las repercusiones fueron inmediatas, algunas de ellas poco felices, pero también lo fue la respuesta de Martín Herrera, con el apoyo de sus padres. Y la siguiente foto que llegó a las redes sociales fue de la acción reparadora.
"Hace unos días publiqué una foto sobre lo que encontré en el Paseo La Calle, casco histórico de Tamberias, indicando que si alguien conocía al autor le digiera que estaba mal lo que había hecho, a los pocos minutos el joven reconoció su error y se comprometió a corregirlo, hoy he visto en esta misma red social que lo corrigió, lo que habla muy bien de él, no podía ser de otra manera, al día siguiente de mi posteo me enteré de quien era nieto, de alguien que conocí, Renzo Herrera, un verdadero defensor de la idiosincrasia y cultura del pueblo", señaló Moroso.
"Ojalá aprendamos todos que los espacios públicos debemos cuidarlos entre todos y cada uno debe defender y cuidar el de su distrito, el mirar para otro lado no nos hace bien. Este joven ha dado una lección a muchos de los que comentaron el posteo, el ser joven no me da impunidad a qué se me justifiquen mis errores, el errar es humano pero el corregir el error es de buenas personas", sentenció.
