El feroz incendio que devoró gran parte del Parque Sarmiento en Zonda el pasado 6 de julio aún se siente en la piel de los animales heridos en aquella tarde trágica, en la que murieron cerca de 30 caballos calcinados. Entre los sobrevivientes hay una yegua que le tocó vivir ese duro momento, que esta a punto de parir y hoy es símbolo de esperanza: no todo está perdido.
“La yegua está a término, eso nos preocupa por qué no sabemos cómo se va a presentar el parto. Tampoco sabemos cómo va a ser el tema de la lactancia porque ella tiene las ubres muy quemadas. Estamos pidiendo donaciones sobre todo de cremas reconstituyente de tejido como Platsul o similares”, explicó Analía Brizuela de Rescate Equino, a Diario La Provincia SJ.
En virtud de la situación es que también piden suplementos lácteos ya que no se sabe si va a poder dar de amamantar a su potranco. En ese caso se le preparará una leche con un biberón con tetinas que simulan la ubre de la yegua.
Si bien desde la Secretaría de Ambiente confirmaron que prestan asistencia con sus veterinarios y medicamentos a los animales que sufrieron las quemaduras, desde los proteccionistas Luciano Castro y Emilia Merino continúan con su colecta de yodo, curabichero en pasta o aerosol, fardos de pasto, alimentos para gatos y perros, Platsul y algunas cremas cicatrizantes, calmantes,?sueros y gasas.
Además de los caballos hay otros animales quemados que necesitan asistencia, ya que el cicatrizado de las quemaduras en algunos casos puede superar los 3 meses y las curaciones se hacen al menos 3 veces al día.
“Hay una mulita que está muy quemada, ahora está empezando a comer y a masticar; tiene muy comprometida una de sus patas”, dijo Brizuela y también contó que hay otro animal, cuyos dueños viven mas cerca del cerro que tiene comprometida su cola, además de una potranca accidentada en el incendio que se recupera.
“Estaba en la entrada de lo que es el parque Sarmiento, asustada por el fuego. Disparó por el susto y se llevó por delante un palo que le provocó una herida en el hombro”, agregó Brizuela quien subrayó que cuando la fueron a curar se dieron cuenta que tenía una astilla de 10 centímetros incrustada en el hombro.
Hay animales que han tenido quemaduras muy leves y hay otros que todavía siguen desaparecidos. “Luego del incendio, a los 4 días aparecieron 4 caballos qué se habían ido para el lado del cerro escapando y luego volvieron. Hay otros que los dueños los están buscando y tienen miedo de que estén lastimados por ahí en el campo”.
Los números para colaborar son: 2645 08-8955, 2645 63-1131, 2645260582 (Analía Brizuela)
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