En julio de 2013, el empresario del transporte público de pasajeros Ricardo Salvá atropelló con su auto a Kevin Malla, de 10 años, que transitaba en bicicleta por calle Nuche, en Capital. Por el impacto, el menor falleció. Seis años después se conoció la sentencia tras el juicio que se concretó esta semana.
El juez Juan Pablo Ortega hizo lugar al pedido de la fiscal Claudia Salica y el empresario fue condenado a 3 años de prisión en suspenso. Su defensa había solicitado la absolución.
Con ello, Salvá no irá detenido y no podrá manejar por 7 años.