Pasaron siete años desde una de las versiones más famosas del reality Gran Hermano y muchas veces los nombres o las caras de los participantes van quedando en el olvido.
Sin embargo, en este caso recordar su rostro va a ser más difícil debido a la transformación a la que se sometió Solange Gómez Abraham o Sol -como le decían en la casa-.
Al salir de GH, la tucumana, una de las favoritas del público, hizo varias producciones de fotos y posó para Playboy. Además, se lanzó como conductora y estuvo al frente de varios ciclos musicales.
Todo eso cambió desde que encontró el amor. Casada con Marcelo Da Corte, un reconocido productor, la joven tuvo a Delfina, su primera hija a quien hoy dedica su tiempo.
Sus posteos en las redes evidencian un pasar económico muy por encima de la media y con ropas de marcas reconocidas, la joven de 29 años ostenta su nuevo estilo.
Quizás lo más llamativo sea que su cara no luce igual. Tan grande es la transformación que sus seguidores de Gran Hermano no la reconocen.
A pesar de las críticas por sus supuestas cirugías, Sol asegura que lo más le enoja es que piensen que alguien puede lucir igual a los 18 que diez años después. “No uso lentes de contacto, tengo ojos verdes desde que nací. Llegaron a señalar hasta que me blanqueé la piel… ¡y solo dejé de tomar sol!", aseguró.
Fuente: ElTrece.
