El Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Dolores brindó la sentencia a los ocho rugbiers acusados de asesinar a Fernando Báez Sosa durante la madrugada del 18 de enero de 2020, a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell.
La jueza María Claudia Castro, quien estuvo acompañada por los jueces Christian Rabaia y Emiliano Lázzari condenó a Máximo Thomsen, Ciro y Luciano Pertossi, Enzo Comelli y Matías Benicelli a la pena de prisión perpetua por encontrarlos culpables del homicidio doblemente agravado por premeditación y alevosía de Fernando Báez Sosa.
Blas Cinalli, Ayrton Viollaz y Lucas Pertossi recibieron una pena de 15 años de prisión. Tras el veredicto, llegará la etapa de apelaciones a Casación de la Provincia de Buenos Aires, para quienes lo crean conveniente.
En ese contexto, Fabián Améndola, uno de los abogados de la familia de Fernando Báez Sosa, sostuvo que la sentencia “se quedó a mitad de camino”. “Era perpetua para todos, de hecho va a ser para todos”, dijo y confirmó que irán a Casación para “buscar la modificación del fallo”.
“La edad de los imputados influyó para que no hayan sido todos condenados a perpetua. Si hubieran tenido 40 años, no les hubiera temblado el pulso”, manifestó.