El mal de Chagas es una enfermedad que se la suele asociar directamente con la vinchuca, insecto que actúa como vector y transmite el parásito que produce la infección. Sin embargo, desde el área de salud informaron que la transmisión vertical, es decir cuando la madre contagia al hijo durante el embarazo, creció significativamente y el 40% de los nuevos casos se debe a esta forma de propagación.
"Esta enfermedad es producida por el parásito Trypanosoma cruzi, el cual ingresa a la sangre del individuo afectado a través de la picadura del agente vector, que es la vinchuca. Hay que destacar que no es la única forma de contagio, ya que la transmisión de la madre al bebé está en aumento", confirmó Eduardo Pucci (MN 68.802), jefe de servicio de neonatología del Hospital de Niños de La Plata.
El especialista dialogó con Crónica y explicó detalladamente distintos aspectos de esta enfermedad. La vinchuca suele estar instalada en viviendas precarias, donde la higiene no es la adecuada. El insecto, que se alimenta de sangre, actúa en periodos nocturnos y succiona la sangre del individuo a la vez que deposita eses contaminadas por Trypanosoma cruzi en la piel del mismo.
Una vez que la persona se rasca, el parásito ingresa al organismo y se desencadena la enfermedad. Desde la Sociedad Argentina de Pediatría advirtieron que hubo un crecimiento de la transmisión perinatal, es decir, durante el embarazo, la cual representaría actualmente cerca del 40% de los casos.
"Cuando nace un bebé de una mamá con Chagas positivo, se analiza con un protocolo especial si el recién nacido está infectado o no. Si da positivo, se lo trata como corresponde y rápidamente se cura", contó Pucci. "Detectar la afección suele ser difícil porque no hay ningún tipo de síntoma o es inadvertido durante los primeros dos a tres meses. Es importante detectarla en esta etapa, porque después se vuelve crónica y genera alteraciones, sobre todo a nivel cardíaco", detalló Pucci, y agregó: "Principalmente produce arritmia, por lo que el infectado va a necesitar un marcapaso para su tratamiento".
Asimismo, remarcó que las personas afectadas no suelen tener acceso a los centros de salud, ya que esta enfermedad está relacionada directamente con la pobreza. Los especialistas sostienen que la enfermedad es curable, pero es clave que se la detecte dentro de los primeros tres meses de contagio.
"En ese periodo inicial, tiene un tratamiento 100% curable. Además, la forma de detectarla es muy fácil, ya que con una gota de sangre se puede saber si la misma está o no infectada. Sin embargo, cuando se hace ese proceso de identificación, es recomendable hacerlo dos o tres veces hasta que se sepa con seguridad que el paciente no está infectado", agregó el neonatólogo.
En este contexto, el profesional de la salud enfatizó en que desde el área se realizan campañas constantemente para concientizar a la sociedad y así, prevenir.