Para el INDEC, el adulto que come con $8 ya deja de ser indigente

Una vez más la medición conservadora del Indec dio cuenta de que la inflación afecta más a los sectores humildes de la población que a los más pudientes, contradiciendo el preconcepto que tiene arraigado el vicepresidente de la Nación, Amado Boudou.

El organismo oficial de estadística detectó además que el umbral de pobreza, determinado por el valor de la canasta básica total, la cual agrega a los alimentos los servicios escenciales, se encareció 1,2%, tres décimas más que la tasa de inflación.

En este caso, el relevamiento del Indec arrojó que la familia tipo que pudo reunir ingresos en el mes por $1.699,66, equivalente a $18,34 por adulto, evitó caer en el estadio de pobreza.

En los últimos doce meses el Indec midió una suba de la canasta básica de alimentos de 7,6% y 11,2% en la que incluye servicios.

Esas variaciones no sólo se mantienen muy alejadas de los cálculos privados, sino que aumentan la brecha en términos de valor en más de dos veces, fenómeno que se manifiesta en la enorme disparidad en las mediciones de las tasas de indigencia y pobreza de la población.

 

Fuente: Infobae