Ese choque con Figal, al final del primer tiempo, fue el desencadenante. Juan Fernando Quintero salió a jugar la parte final ante Independiente, pero a los 12 minutos debió dejar la cancha con un indisimulable dolor y un preocupante gesto de preocupación. No era para menos.
Después del 3-0 a Independiente, Juanfer fue a hacerse los estudios médicos correspondientes y se confirmó lo peor: rotura del ligamento cruzado de la rodilla, lesión que lo tendrá al menos seis meses afuera de las canchas.