viernes, 23 de agosto de 2013
10:26
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El volante central fue titular en los dos partidos de local de San Martín. A muchos hinchas les gusta su estilo, a otros no tanto. Claro aún tiene la tarea de gustar a todos. Sin embargo, el técnico Daniel Garnero lo conoce de Independiente y tiene plena confianza en él. Iván Pérez habló de él, del equipo, del 4 a 3 en el clásico con Independiente Rivadavia y de Huracán, el rival de la próxima fecha.
¿El triunfo en el clásico sirve emocionalmente?
La carga emocional y la confianza crece mucho cuando se gana un clásico de la manera que ganamos. Pudimos haberlo ganado cómodamente porque era mucha la diferencia en el primer tiempo. Después errores nuestros hicieron que el rival nos empatara.
¿Qué aporta más a lo psicológico, ganarlo al partido cómodamente o demostrando esa fortaleza para superarse en la adversidad?
Obviamente que cualquier jugador quiere terminar ganando 3 a 0. Lo que pasa es que cuando estábamos tres goles arriba cambiamos nuestra forma de jugar y eso hizo que el rival se agrandase. De todas maneras quedaba todo el segundo tiempo para que pudieran hacer algo más.
¿Se dio todo lo contrario a un clásico por lo abierto que fue?
Sí, pero eso quiere decir que hicimos las cosas bien, reparamos en que el rival quería eso y no dejamos que el partido fuera para el lado del trámite cerrado y friccionado. Tratamos de tener el mayor tiempo posible la pelota, por momentos se logra en otros no, pero lo importante es que se ganó.
Y en eso de perder la pelota ¿Cuánto hay de virtud en el rival y cuánto de falencias propias?
La tenencia de la pelota te lleva a terminar de una mejor o peor manera una jugada, pero el rival también juega y no se le pueden quitar méritos. En la cancha somos 11 contra 11. De igual manera San Martín está preparado para jugar de igual a igual en cualquier lado.
¿No pensaron demasiado en ir a buscar más goles y eso les pasó factura con los tantos en contra?
Puede ser. Seguramente el equipo quedó medio partido, más que nada en el segundo tiempo, pero también hay que tener en cuenta que el cansancio en uno juega mucho. Bueno, aprenderemos de esos errores para no volverlos a cometer.
¿Los cambios obligados de Kruspzky y Mattia influyeron?
Seguro, porque son dos jugadores muy importantes para nuestro sistema y lamentablemente tuvieron que salir por lesión. Pero también los chicos que entraron lo hicieron de la mejor manera y sirvió para que pudiéramos llegar al triunfo.
Vos llegaste y con dos entrenamientos jugaste en la primera fecha y ante la Lepra no pudiste entrenar bien por la lesión ¿Te pasó factura físicamente?
Sí seguramente. Son cosas que pasan. Tuve la mala suerte de no poder hacer una buena pretemporada, como todo jugador desea, para rendir de la mejor manera, pero tengo la suerte de contar con un grupo de jugadores que me ha respaldado de la mejor manera y eso me deja tranquilo para esforzarme en la semana y llegar bien a los partidos.
¿Te queda la preocupación porque el rival se los empató y puso en peligro el triunfo o la tranquilidad de haberlo definido a tiempo?
Quedan las dos sensaciones juntas porque como jugamos el primer tiempo es una lástima que nos hayan empatado y que hayamos terminado sufriendo. Pero a la vez contento porque el equipo demostró que ante cualquier dificultad puede redoblar la apuesta y hacer la diferencia para el triunfo.
¿Creés que ante Huracán se planteará una situación distinta?
Esperemos que sí. Ellos son locales y van a tener la presión porque no vienen tan bien. La verdad es que todo en cierta manera juega a favor de nosotros que venimos muy bien.
