Érica Rementeria y su madre, Elsa Mercado, cautivan en la provincia de Entre Ríos con sus productos 100% naturales. Ambas participan en la Fiesta del Canasto en Concordia, celebrada este sábado y domingo, con sus cestos de palma, elaborados con una técnica ancestral de los pueblos originarios.
"La municipalidad de Concordia nos invitó a este encuentro, al que también vienen desde Corrientes y otros puntos del país", dijo Érica a Diario La Provincia SJ y agregó: "Tenemos un stand para exponer nuestros cestos y también para trabajar mientras la gente nos observa".
Es un emprendimiento familiar que comenzó luego de la crisis de 2021. "Trabajo con mi mamá, que hace cestería conmigo, y también hacemos prendas desde el hilado. Pero en casa también hacemos otras cosas", comentó. Aunque siempre lo hicieron, fue en 2002 cuando decidieron hacerlo para la venta y comenzaron a salir a las ferias; actualmente tienen exposiciones permanentes en el Mercado Artesanal.
Para la muestra y venta en Entre Ríos, llevan sus productos: "Son cestos pequeños, el material es palma y todos están adornados con objetos de la naturaleza, como vainas de algarrobo y semillas de retortuño. Todo lo que nos brinda la naturaleza sin intervención", expresó. El objetivo es mantener una técnica tradicional de los pueblos originarios.
Al respecto agregó, "la construcción se hace de forma espiralada, pero no se le agrega ninguna toxina para que el objeto vuelva a la tierra sin contaminantes", y completó , "la idea es que cumpla su función útil y regrese a la tierra sin otra intervención que el trabajo de la pieza".
El conocimiento viene desde tiempos atrás, en sus raíces de pueblos originarios provenientes del norte sanjuanino. "La abuela de mi abuela hacía la técnica, pero con otro material. Como ellos vivían en Huaco, se conseguía un yuyo que se llama cachiyuyo, que crece en la precordillera. Acá en la zona del valle no hay; el yuyo se cosía con lana", dijo.
Al no conseguir el yuyo en Albardón, lo adaptaron a la palma: "Nosotros vivimos en una finca y tenemos las palmeras aquí a disposición, y en época de poda hacemos recolección en la calle, juntando el material en verde", explicó. Luego de que se seca, se humedece y se construye el objeto.
Ambas dan clases para todos los que quieran aprender en la Casa de la Cultura de Albardón, los martes y miércoles, sobre cerámica. Su vínculo con sus raíces es aún más profundo, ya que complementan con dulces caseros sin químicos y panificación tradicional, además de los hilados, la cerámica y la cestería. Además, Érica es profesora de Artes Visuales.