El Servicio Penitenciario Provincial -SPP- alberga en la actualidad a un total de casi 1900 internos y 1400 trabajadores penitenciarios que desarrollan su labor en diferentes sectores, un número que preocupa a las autoridades, ya que la capacidad del penal es para 850 internos.
Esta superpoblación deviene en una constante clasificación y reubicación de quienes cumplen condenas allí, para no llegar al hacinamiento. Y lejos de una solución inmediata con el nuevo penal en Ullum, una de las obras que se encamina como un verdadero respiro es la construcción del sector 5, que es desarrollada con un diseño arquitectónico de vanguardia y un modelo carcelario como en ciudades de Europa.
Lejos de los largos pasillos y pabellones con celdas en paralelo y enfrentadas entre sí, el nuevo sector que albergará a internos de seguridad media y que obedezcan ciertas conductas, se organiza en varios núcleos, cada uno con una torre de vigilancia para el personal penitenciario frente a un patio interno en donde las celdas se ubican paralelas y alrededor del patio, en dos pisos. En total alcanzaría las 250 celdas unipersonales.
"El sector cinco, que está en conducción, el señor Gobernador tiene la decisión tomada de agilizar ese sector a través del Ministerio de Obras Públicas. Está agilizando con el ministro y con todo su equipo y conjuntamente la Secretaría de Seguridad y el Servicio Penitenciario se destrabó toda la parte administrativa y económica. Tuvimos que actualizar los pagos porque el año pasado la inflación fue un problema severo, y hubo re determinaciones al valor original", dijo Enrique Delgado, director del SPP, a Diario La Provincia SJ.
Hasta el momento y por el avance de la obra, se espera que lleve al menos cinco meses más, por lo que el nuevo sector podría estar terminado en agosto o septiembre. El mismo cuenta con celdas con capacidad para una cama y un sector de duchas junto con otro de baños. Todos, vigilados por el personal desde la altura de la torre interna que brinda mayor seguridad tanto para ellos como para evitar conflictos entre reclusos.
“El punto de conflictividad que tiene el Servicio Penitenciario hoy, es el tema de falta de cupo, falta de celdas. Tiene un recurso humano, un recurso humano profesional no es el óptimo en el numerario, porque realmente a nivel nacional, internacional es 1 a 1 de 1900 internos, 1900 empleados. No es que esté en 1900 empleados trabajando en un mismo día, hay que dividirlo en 4. 300 para cuatro sectores, administrativos, profesionales, maestranza y seguridad; hay 20 personas por guardia. O sea que un número muy pequeño para manejar”, agregó Delgado.
Además, cada núcleo cuenta con un patio exterior totalmente perimetrado donde los reclusos podrán realidad actividades deportivas y recreativas en los tiempos permitidos. Allí, también se piensa llevar oficinas de profesionales psicólogos y psicopedagogos para no tener que trasladarlos a otras áreas.
Por su parte, las celdas también cuentan con la capacidad de instalación de sistemas de apertura o avisos electrónicos, aunque hasta el momento serán manuales y manejados por el personal penitenciario. Esta posibilidad también es resaltada entre los trabajadores que allí se desempeñan, ya que advierten de la mayor seguridad con la que podrán contar.
"Toda esa falta de cupo o de falta de alojamiento es suplantado por la idoneidad del personal penitenciario. Ya porque primero, en la detección del problema, se hace una adecuada clasificación de acuerdo a lo que está mirando cuando aparece el conflicto, y automáticamente sabemos cuál es la causa del mismo. Hoy por hoy el Servicio Penitenciario de San Juan es manejado por el personal penitenciario", cerró Delgado.
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