Historia

"Acá no importan ni las uñas ni las pestañas, solo salir adelante": el desafío de sanjuaninas cosechadoras

Las "mujeres todo terreno" enfrentan el sol en la mañana y plena siesta para cosechar. Algunas son madres, otras estudiantes o amas de casa. Todas tienen el mismo objetivo: salir adelante.
sábado, 17 de febrero de 2024 18:58
sábado, 17 de febrero de 2024 18:58

Algunas son madres, otras estudiantes. Todas son mujeres y comparten el mismo objetivo: salir adelante. Lucía Maya tiene 25 años y es la voz de un grupo de sanjuaninas que se definen como "mujeres todo terreno". Son las chicas que día a día trabajan en la cosecha de la uva en Calingastina y se enfrentan a los desafíos del tiempo, poniendo la mejor cara. 

"Acá no importan ni las uñas ni las pestañas solo importa salir adelante", aseguró Lucía a Diario La Provincia SJ cuyas palabras se convirtieron en el puntapié para contar su historia. Ella tiene 25 años de edad y es estudiante de Profesorado de Nivel Inicial. Durante todos los días de la semana, de 8 a 12 y de 15 a 19 horas, se cubre bien el cuerpo para protegerse del sol y salir a trabajar. 

A veces el termómetro marca 35 grados y otras 42 grados, sin embargo el objetivo está claro, "salir adelante". "Somos un grupo de 15 chicas de 18 a 40 años de edad. Para alguna es el primer año en cosecha y para otros hace dos o tres años que trabajamos en esto. En mi caso es el tercer año que trabajo", relató la joven oriunda de Barreal quien destacó: "para mi caso, y para mis compañeras, éste es un trabajo muy sacrificado porque ha estado haciendo mucho calor".

Las "mujeres todo terreno" se completa con Maricel Jofré, Margarita Castillo, Celeste Pérez, Yohana Castillo, Teresa  Vazquez,  Micaela Navea, Nazarena Pizarro, Guiliana Gallardo, Brenda Castillo e Itati Ibaceta. 

Todo el trabajo dura 3 meses. Con la cosecha están un par de días y luego se dedican a hacer mermeladas, dulces, salsas y tomates disecados para una fábrica de su localidad. Con sus compañeras le ponen manos a la obra todo el tiempo para brindar lo mejor de sí.

"La mayoría somos mamás. Hay varias chicas estudiante e incluso amas de casa. Usamos gorra y mucha agua para protegernos del calor. Nos vamos cambiando por grupo, vamos rotando para que no esté un grupo mucho tiempo al sol y nos haga mal", confesó Lucía, quien es mamá de un nene de 8 años.

Su expectativa para este 2024 es poder recibirse en el profesorado de Nivel Inicial. Para ello, parte de lo que gane con el trabajo de esta temporada, lo tiene destinado para comprar útiles y mucho material didáctico que le sirva para su carrera. "La mayoría de ese dinero va destinado a la compra. Mi meta es recibirme este año, porque es el último de la carrera", expresó con una sonrisa. 

El trabajo de cosecha es considerado para muchos como un trabajo solo para hombres. De hecho, en Barreal, se llama mucho a hombres para trabajar en la producción sin embargo "hay más demanda para trabajar de las mujeres".

"Hoy hay más mujeres. Estamos todo el tiempo por eso cuando nos miramos las manos, vemos que las tenemos rotas. No nos podemos cuidar las uñas pero nada de eso nos da vergüenza", finalizó.

 

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