Desde hace ya varios años, la Dirección de la Mujer en San Juan registra un sostenido aumento de casos de denuncias y pedidos de protección por parte de mujeres que sufren violencia de género por sus parejas o algún miembro de la familia, a diario.
Sin embargo, en el comienzo del 2022 esta situación no disminuyó, y en el promedio diario, Adriana Ginestar, responsable de la institución, reveló que son cerca de 30 solicitudes de pedidos de protección las que se reciben día a día, a través de la sede de la Dirección y de sus equipos en los diferentes municipios de San Juan.
"Estamos en un promedio de 30 solicitudes de protección diarias, de situaciones de violencia que no constituyen delitos (...) Es la cantidad que venimos manejando desde el año pasado y que se va replicando año a año y que, de hecho, aumentan", reveló Ginestar a Diario La Provincia SJ.
Al respecto, aseguró que la mayor cantidad de denuncia se da en la franja etaria que va desde los 18 a los 30 años, es decir, mujeres jóvenes. "Se trata de mujeres que han sufrido violencia en la pareja o ex pareja, que las siguen hostigando o maltratando de alguna manera, pero también se presentan denuncias por violencia dentro del grupo familiar o intrafamiliar", explicó.
En cuanto a la protección que se brinda, la Dirección de la Mujer cuenta, en provincia, con equipos interdisciplinarios y a su vez, en cada municipio, con equipos interdisciplinarios integrados por psicólogas, abogadas y trabajadoras sociales.
"Cuando una mujer se encuentra en situación de violencia, el abordaje tiene que ser integral. Cuando una mujer se anima a ir a hablar, la psicóloga le brinda contención, la ayuda a ordenarse en la situación que personalmente tiene y va a tratar de que ella visibilice la situación de peligro en la que está. La mayoría de las mujeres llegan sintiéndose culpable de la situación de violencia, se responsabilizan por ese mismo dolor que están sufriendo, justifican constantemente al varón, es algo común en sus relatos", contó.
Posteriormente, la trabajadora social, trabaja con la mujer en la proyección y construcción de un nuevo proyecto de vida, fundamentalmente que logre la independencia económica del agresor. Para ello, Ginestar resaltó que hay dos programas importantes, el Potenciar Trabajo y Acompañar, que son herramientas que llegan del Ministerio de las Mujeres, del que la Dirección de la Mujer es unidad ejecutora en la provincia.
"A través de los programas les brindamos una ayuda económica para que logren salir de esa situación de dependencia económica, y a su vez se les brindan herramientas para que piensen en armar alguna fuente de trabajo que les sirva, para que después de que terminen el programa, puedan continuar. Después la abogada las asesora en todos los trámites legales y les facilita el acceso a la Justicia", sostuvo.
En los meses que se estuvo en Fase 1, en la pandemia, Ginestar contó que se redujo las cantidades de los pedidos de ayuda y eso indicó que había factor de riesgo porque las mujeres no se podían acercar a pedir ayuda. "En ese momento, se incrementó en la Dirección, una línea de WhatsApp las 24 horas, se refuncionalizó la línea 0800, es decir se incrementaron los canales de comunicación a las mujeres hacia las instituciones que les brindan ayuda".
"Lo que nosotras interpretamos con la mayor cantidad de denuncias, lo atribuimos al empoderamiento de las mujeres. Hablamos de que la mayor información, concientización que tienen las mujeres acerca de la violencia. Se han dejado de naturalizar situaciones de violencia diaria que antes eran hasta legitimadas. Hoy por hoy hay mujeres que reconocen cuándo están en una situación de violencia, y si cuando las reconocen ponen límites, si a eso no lo pueden frenar, van a las instituciones y visibilizan las situaciones", agregó sobre el análisis que se hace.
"Por eso se da en edades de mujeres más jóvenes, porque precisamente las nuevas generaciones de mujeres están ya formadas de otra manera", cerró, resaltando la importancia de los contextos actuales.
