Los profesionales kinesiólogos que trabajan en internación domiciliaria y en terapias intensivas en sanatorios sanjuaninos iniciarían medidas de restricción de servicio por el pago de prestaciones. Consideran que los aranceles son muy bajos y la situación es insostenible, ya que son pocos los licenciados especializados. Explicó que se enviaron notas a 25 empresas en total.
Luis Martínez, presidente del Colegio Fisiokinésico de San Juan, manifestó que el reclamo es, en principio, hacia las empresas que brindan ese servicio. "Con las empresas de internación domiciliaria, el valor de la hora de trabajo es muy bajo; es hasta delirante. Esto es tomando en cuenta los años de formación y con lo que cuesta estar en un área crítica. No se puede cobrar entre $700 a $850, la hora. No se llega a los $1000 y eso nos pone en una situación crítica", dijo en radio Colón.
Marcó que como Colegio que representa a los profesionales, comenzaron a negociar con los sanatorios. "Las medidas son con las empresas mencionadas. Con SMI entramos en conversaciones y mañana tendríamos reunión por quienes están en internación domiciliaria. El profesional invierte tiempo, conocimiento y tiene que pagar su transporte. Y ellos tienen que afrontar las distancias que se demanden", explicó.
Para Martínez, "la kinesiología ha sido el factor de ajuste que han tenido las empresas para mantener la operatividad. A otras prestaciones les pagan honorarios dignos, nada que ver con lo que pasa con nosotros. Hay que revalorizar al profesional".
El profesional confió en poder ir resolviendo uno a uno los reclamos. "Sólo con medidas, visibilizamos la necesidad del profesional. Un kinesiólogo es sumamente importante en las terapias de los sanatorios. Eso es algo grave pero lo haremos por una razón justa: el profesional tiene que vivir de una remuneración justa", dijo.
