Historia

Renacer entre los escombros: perdieron todo en el terremoto y trabajan a pleno para construir su casa

El 18 de enero del 2021, la vida de Gema y su familia cambió 100%. La humilde vivienda se desmoronó con el terremoto y desde aquel día poco a poco van levantando su casa propia.
martes, 18 de enero de 2022 00:00
martes, 18 de enero de 2022 00:00

“En cuestión de segundos todo lo que nos costó tantos años de esfuerzo se vino abajo”. Con esas palabras, Gema Gonzales recordó el duro momento que le tocó transitar aquel 18 de enero de 2021. Su familia fue una de las tantas que perdió su hogar a causa del terremoto que sacudió a San Juan y que tuvo como zona del epicentro Pocito y Sarmiento. 

A un año de aquel hecho, en su memoria se suceden una y otra vez las imágenes de lo que fue el sismo, y las consecuencias del mismo. “Como nunca ese día estábamos todos despiertos, sentados afuera. Por lo general mi papá y mi abuela suelen estar acostados temprano. Cuando empezamos a percibir el movimiento, yo lo primero que grité fue terremoto. Lo primero que hicimos fue asistir a mi abuela que justo estaba en la silla de rueda. Por cubrirle la cabeza me lastime toda la mano, había escombros por todos lados”, comenzó recordando Gema a Diario La Provincia SJ. 

La joven describió que su mamá y su hija Nerina tenía una crisis de nervios ante la situación que estaban viviendo. “Mi esposo Neri agarró a mi hija y la abrazó muy fuerte. Ella no entendía lo que estaba sucediendo, fue realmente un momento muy feo”, mencionó. 

Después, de unos minutos, Gema y su familia no lograban percibir las consecuencias que este terremoto les había ocasionado. Entre escombros y sin energía eléctrica no podían medir la magnitud del daño material que este fenómeno les había ocasionado. “Entrar era terrible, hicimos el coraje de hacerlo y estaba todo lleno de vidrio. El televisor y la mesa rota, una nube de polvo que imposibilitaba la vista. Seguíamos con ese temor de que un nuevo movimiento hiciera que lo poco que nos quedaba se terminara de destruir”, remarcó.   

Y agregó: “las paredes estaban partidas, la mitad del techo de la cocina estaba caído, era una situación realmente terrible. Llorar desesperados, porque si bien estábamos todos vivos, habíamos perdido prácticamente la casa. No sabíamos cómo íbamos hacer para poder salir adelante. Nos llamaron todos los familiares y llegaron todos a casa para ayudarnos a sacar los muebles que habían quedado atrapados adentro”. 

La hija del matrimonio, estaba desesperada al ver ese panorama, y quería ayudar a su mamá para poder sacar los alimentos que habían quedado. Ella buscaba ropa para abrigar a sus familiares. Todos los muebles los ubicaron en el fondo de la casa, allí se quedaron cuidando las pertenecías que les habían quedado.  

Al otro día, debieron tapar las cosas con nailon para evitar que se mojaran por si llovía. Al resto de las pertenencias las colocaron en una galería. Sumado al terremoto, después se vinieron las inundaciones, el panorama era aún más difícil para la familia de Gema.  

“Por medio de Silvio Vargas nos dieron una carpa donde guardamos lo que teníamos a la intemperie. Para colmo con las inundaciones perdimos la mercadería y muebles, un desastre realmente. La pasamos muy mal, una detrás de otra. Después nos dieron el módulo donde estamos viviendo ahora, y nos contagiamos de Covid, tuvimos que aislarnos”, describió Gema. 

Fueron muchas las situaciones que tuvieron que atravesar la familia de Gema y Neri. Entre las cosas difíciles que tuvieron que padecer, una de ellas fue pedirle a su pequeña hija que no siguiera haciendo danzas y de esta manera poder invertir para la construcción de su casa. Gema, con la voz temblorosa resaltó que su hija supo entender la situación y prefirió, después de todo lo que habían pasado que construyeran la casa. 

“Los dos trabajamos, en mi casa, pero los sueldos no nos alcanzaban para pagar los materiales, por ese motivo tuvimos que empezar a prohibirnos de muchas cosas. Empezamos a ahorrar e hicimos rifas para empezar a construir la casa. El 28 de enero empezamos, pusimos manos a la obra. Mi papá es albañil, junto a mi hermano y mi esposo comenzamos a ponernos de pie nuevamente. Así comenzamos nuestro sueño de la casa propia”, resaltó Gema. 

Querían terminar la construcción del hogar para este año, pero se les imposibilitó debido al alto costo que tienen los materiales para la construcción. “Si Dios quiere el año que viene tendremos nuestra casita para poder habitarla. En febrero esperamos a que nazca nuestra hija, porque después de tantas cosas feas que pasamos este año 2021, Dios nos regaló la dicha de poder ser padres. De alguna u otra manera estamos saliendo adelante y poniendo toda nuestra voluntad para pronto poder terminar de construir nuestro hogar”, finalizó Gema. 

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