Comenzó la Primavera en San Juan y con ella, una preocupación. Se trata de la probabilidad de ocurrencia de heladas tardías que dañan a cultivos como la vid que ya ingresaron en la etapa de brote. La incidencia de un fenómeno podría complicar el panorama y obliga a tomar previsiones.
"Ante las consultas que tenemos del sector productivo, recomendamos que se preparen para eventuales heladas tardías. Nuestra Primavera se caracteriza por la inestabilidad y la influencia de La Niña podría causar inconvenientes. Esto, sumado a la sequía que nos afecta hace que tiempo genera condiciones de riesgo", destacó a Diario La Provincia SJ, el climatólogo Germán Poblete.
Destacó que en nuestra provincia, sobre todo en las fincas con vides en 25 de Mayo, Sarmiento, Caucete, 9 de Julio y también en Zonda, "se combate la temperatura bajo cero con calor; al encender tachos con aceite o se generan fogatas. Es una técnica tradicional y no recomendada para lo que significa el ambiente. Como se alcanza tan rápido una temperatura que quema los brotes, se trata de actuar rápidamente".
Además, explicó que este "es un fenómeno temido y hace varios años que no se registra de manera aguda. En 2013 y 2015 hubo episodios muy dañinos y de los que se aprendió sobre la importancia de las previsiones. Lo que hacemos es seguir en detalle cómo se presenta la Primavera y hacer las advertencias pertinentes, tomando en cuenta que hay situaciones que pueden generarse en cuestión de horas".
De acuerdo a Meteored, a las complicaciones por las que están pasando actualmente los cultivos se le suma la preocupación por los pronósticos de mediano y largo plazo. Según los modelos numéricos de proyección climática se observa y se afianza la probabilidad de presentarse un nuevo evento La Niña desde la primavera extendiéndose hasta mediados del verano.
Esta situación podría potenciar aún más la falta de agua en amplios sectores de las zonas productivas del país, mientras que aumenta el riesgo de presentarse heladas tardías en zonas del centro del país debido a la gran variabilidad térmica que se seguiría observando en los próximos meses.
De todas maneras, hay que ir siguiendo la evolución semana a semana de las diferentes variables, especialmente de las precipitaciones, para analizar los potenciales eventos, ya que la situación prevista promueve el desarrollo de fenómenos localizados de gran volumen, generando una gran variabilidad tanto espacial como temporal.
