El complejo deportivo y cultural más grande que tiene Rawson, espera por ser inaugurado en su rama cultural, ya que por la pandemia, no se pudo avanzar en 2020. Si bien el espacio deportivo sí fue inaugurado en 2019, aún no ha podido funcionar en su totalidad.
El lugar carga con una amplia historia, ya que anteriormente en el edificio había una de las bodegas más importante en San Juan: "La Superiora". Allí funcionó hasta la década de 1970, hasta que en la actualidad, la Municipalidad de Rawson la reformó y la convirtió en este gran centro cultural y deportivo. Su ubicación es en calle Doctor Ortega y Conector Sur.
La Secretaria de Cultura del departamento, Maite Peluffo, dialogó con Diario La Provincia y anticipó que son muchos los proyectos que ya están encaminados para que funcionen en el complejo y que "si la suerte nos acompaña y también la situación sanitaria, lo estaremos inaugurando entre fines de este año y principio del próximo con la idea de que ya esté en marcha por completo a mediados de 2022".
"Se trata de un lugar histórico, que lleva mucha carga histórica consigo y que en su momento fue un centro laboral muy importante. Este complejo ya está funcionando en materia deportiva desde 2019, ya hubo competencias de voley, básquet y hockey sobre patines. Nos falta la parte cultural que aún no la podemos poner en funcionamiento por la pandemia. El espacio cuenta con planta baja, primer piso y subsuelo", sostuvo la funcionaria.
Peluffo anticipó que son muchos los proyectos que se tienen en mente y en los que ya se comenzó a trabajar. "Nuestra principal idea es que en el primer piso funcione el primer museo del vino de la provincia. Queremos que haya cata de vinos, que la gente aprenda la historia de nuestra principal actividad vitivinícola y los productos que se elaboran en San Juan, como así también mostrarle al mundo el proceso de elaboración".
La funcionaria comentó también que otra de las ideas que se comenzó a encaminar es la puesta en marcha de una confitería, como así también la exposición de artesanos en boxes que ya están armados. En el subsuelo está todo preparado para una galería de arte que pueda en un futuro funcionar con exposiciones de grandes artistas. Se planea también dar clases de música de manera gratuita para los jóvenes que quieran aprender y sean de bajos recursos.
"En la parte de afuera contamos con un auditorio al aire libre que en un futuro albergará a diversos artistas y numerosos eventos. Tenemos un amplio playón de cara a calle Paula, donde pondremos a funcionar próximamente una escuela de manejo municipal que se podrá concretar allí. En la parte interior también tenemos un salón grande de conferencia donde convocaremos a charlas, exposiciones entre otras cosas", manifestó la Secretaria de Cultura.
"El espacio es abrumador de grande, nos llena de orgullo contar con este increíble lugar desde el que podemos aportar a la cultura y al deporte de una manera impresionante. Estamos súper ansiosos de poder inaugurarlo ya y poner en marcha todos estos proyectos que tenemos encaminados", manifestó Maite Peluffo.
HISTORIA DE LA SUPERIORA
Abrió sus puertas en 1897, marcó la historia de la industria de la provincia durante cien años, pero después cayó en crisis y fue abandonada. Su historia comenzó con el viaje de Manuel Lemos, cuando sólo tenía 17 años, desde La Romallosa, Galicia, España, hacia la Argentina. Lemos dio sus pasos iniciales en la industria vitivinícola fundando su primera bodega en Rusell, Mendoza, y luego compró en un terreno en Villa Krause. Allí fundó La Superiora, que recibió el nombre en homenaje a una monja que conoció durante su viaje en barco.
La bodega creció vertiginosamente. Alcanzó a moler 17 millones de kilos de uva y elaboró 15 millones de litros de vinos finos y comunes. En su apogeo, la empresa llegó a tener 30 plantas fraccionadoras, distribuidas en distintos lugares del país. Además, contaba con 40 vagones tanques propios en el Ferrocarril Belgrano y 25 en el San Martín, elaboraba a su vez 2 millones de litros de vino oporto para la bodega licorista Saenz Briones y Cía, que luego vendía al mercado con la marca 'Oporto El Abuelo'.
