Este 25 de septiembre se celebra a nivel mundial el Día del Farmacéutico, eslabón fundamental de todo sistema de salud en cada parte del mundo, y que como muchos otros tomaron relevancia en contexto de pandemia. Así lo vive y lo siente Daniel Arrieta, un "famacéutico de barrio" como se denomina él, quien a diario deja el corazón en cada atención o consejo que el paciente que llega a su farmacia le pide.
Ubicado hace 27 años en la esquina de calles Cabot y San Miguel, en Rivadavia, Daniel vivió cientos de momentos y supo crear lazos de familiaridad con los vecinos, quienes con confianza le cuentan sus situaciones y piden "lo que le haga mejor" para sanar dolores.
"Elegí esta profesión, que era la que me gustaba, porque siempre sentí que ser farmacéutico era brindar un servicio esencial a la comunidad, cosa que se denominó como tal en estos tiempos de pandemia. Si bien estamos en una esquina muy conocida, el diálogo que tenemos con los vecinos es de otra manera que en una farmacia de 24 horas", comenzó contando Daniel a Diario La Provincia SJ.
Sumergido junto a sus dos compañeras, en la atención al joven y al abuelo a quienes saludan con cariño porque ya los conocen, el farmacéutico revela que varias veces sintió la cercanía con el vecino más allá de la sola compra y venta de un medicamento.
"Estamos en la parte de salud y muchas veces los vecinos nos confían eso de ellos, establecemos vínculos cotidianos y si bien nunca hubo alguna situación que pasó a mayores, siempre las relaciones han sido amenas con todos, a veces hasta de mucha confianza para que los ayudemos. Las farmacias de barrio somos más comunicativas, somos todos partes de una comunidad", aseguró.
Este año, el lema para celebrar este día es "Transformar la salud mundial", actividad que desde lo pequeño y cercano, Daniel lleva a cabo con pasión.
"Es una tarea que nos demanda mucho, tenemos que estar todos los días del año y no podemos cerrar, eso lo vimos cuando comenzó la cuarentena, nosotros junto a ferreterías y supermercados permanecimos abiertos todo el tiempo. En este tiempo tuvimos clientes que vinieron a preguntar sobre posibles medicamentos que querían tal vez a modo de prevención, pero es algo que tuvimos que desmentirles. Nunca recetamos algo que aseguramos que va a ir bien para tal situación ya que además es algo que no nos compete", subrayó.
Por último, motivó con un sincero mensaje a quienes deseen y se interesen en sumarse a las farmacias no solo de San Juan, sino del mundo, para brindar una atención responsable y desde el corazón.
"A los chicos y los interesados en esta profesión les diría que si realmente les gusta esto que estudien y se perfeccionen porque no se trata de sólo vender medicamentes, y a la gente en general, a la comunidad que sigan siempre confiando en nosotros, que vamos a seguir cumpliendo con nuestra tarea, siempre dando lo mejor", finalizó.
