Noha Aciar Ochoa tiene 2 añitos y mucha fuerza para vivir. A poco de cumplir 3 meses de su nacimiento sufrió una hemorragia que lo llevó a estar vario tiempo en Terapia Intensiva y terminó con parálisis cerebral, cuadriplejia y ceguera. Desde esa época hasta ahora su progreso era progresivo de la mano de una rehabilitación constante, sin embargo la pandemia le frenó el crecimiento.
El pequeño nació el 7 de enero de 2018 y es el más chico de 4 hermanos. Vive en 9 de Julio donde recibe todo el amor de sus padres. Su papá con la pandemia también quedó sin trabajo y se dedica a hacer changas mientras que su mamá es portera de una escuela de la villa cabecera. En este escenario, la mirada de la familia está depositada en la esperanza de la ayuda de los sanjuaninos.
"La vida nos cambió muchísimo. Mi hijo por la pandemia no está teniendo rehabilitación. Antes tenía 5 veces por día e implica estar todo el tiempo para él porque no se sabe desarrollar. Es estar ahí", comenzó expresando Celeste Ochoa, mamá del pequeño, a Diario La Provincia SJ.
Hoy el único sueldo que ingresa al hogar es el de ella que cobra 18 mil pesos y con eso tiene que comprar pañales y leche para Noha y medicamentos porque el niño hace convulsiones. Además cuando sale a trabajar tiene que pagar a alguien para que lo cuide y además usa félulas para sus pies que ella tiene que comprar cada 6 meses y salen 30 mil pesos.
"Con la rehabilitación se va adelante pero es todo a su tiempo. Es esperar que de a poco tenga mejor calidad de vida. Si bien lo que tiene le afectó al cerebro, porque éste manda ordenes a todo el cuerpo, con la rehabilitación iba avanzando", agregó.
Para mejorar su calidad de vida, el pequeño necesita también un andador ortopédico que tiene un valor aproximado de 600 mil pesos. La obra social con la que cuenta la madre, y que abarca a la familia, no le cubre el andador, por ende tendría pagarlo ella pero eso es imposible.
"Mi hijo necesita esa silla postural y la cobertura es muy poca. Por eso también necesito una pensión para mi hijo. Si bien tengo sueldo, no alcanza y necesito los recursos. Él toma leche y usa pañales. Mi marido está sin trabajo y lo que hay es para la comida del día a día", pidió Celeste.
Hace 2 años inició la pensión en ANSES y le dijeron que no se la podían dar porque trabaja como personal de servicio en la escuela y cobra el salario por discapacidad, que es apenas de 2 mil pesos.
"Hace un mes vi la entrevista de una mamá que trabaja también para el Estado y al principio le negaban la pensión para su hijo con discapacidad pero al final se la dieron porque es ley", expresó la mamá de Noha.
Cualquier ayuda que puedan darle al pequeño, se deberán comunicar al 264-563-7897
