Elías Cabello es la prueba viviente de que no importa lo mucho o poco que uno tenga, siempre es posible ayudar al prójimo en los malos momentos. Vive en el Asentamiento Evita, junto a su esposa embarazada y sus tres nenas y pese a que desde el comienzo de la pandemia se quedó sin trabajo, se preocupa por acercarles un plato de comida a sus vecinos.

"El merendero se llama "Juntos por los más pequeños". Tenemos a más de 200 niños que asisten a retirar la merienda, ya que es la única forma de cumplir con el protocolo. Cuando conseguimos donaciones también repartimos almuerzo. Hay gente que me conoce y colabora conmigo y otras tres chicas que nos ayudan. Ayer repartimos hamburguesas donadas por UPCN, también mis amigos aportaron lentejas la semana pasada y las cocinamos entre los colaboradores", contó Elías a Diario La Provincia SJ.

Churro, sopaipillas, lentejas, locro, panchos, lo que consiguen en donaciones llega directamente a la panza de los chicos que viven en La Bebida, en Rivadavia.

Trabajaba como obrero, pero la cuarentena lo dejó sin la posibilidad de hacer changas. Por ahora, produce y vende adobe (a $5 la unidad) y sale a vender golosinas para mantener a su familia y poder ayudar a los demás.

"Para el Día del Niño queremos hacer un chocolate caliente con unas facturitas caseras para que los chicos vengan por mi casa y lo retiren. Queremos entregarles un presente para que sepan que los tenemos en cuenta. Ellos se merecen un día mejor que cualquiera porque son nuestro futuro".

La gente que quiera colaborar puede comunicarse directamente con Elías al 2644190070. "Nos gustaría contar con gallardetes, juguetes aunque estén usados, golosinas, harina. Además, necesitamos con urgencia una batidora porque la nuestra ya no funciona. La idea es que no importa lo que esté pasando en el mundo, que los chicos no pierdan la ilusión".