Calles vacías, personas saliendo tímidamente a los jardines de sus viviendas para ser entrevistadas por los agentes sanitarios, autos queriendo ingresar y policías por todos lados. Las postales son del barrio Natania XV pero perfectamente el escenario puede ser de cualquiera de los barrios aislados en San Juan.
Este miércoles en la siesta, un equipo de Salud Pública y Desarrollo Humano articularon el trabajo para salir a las calles y encarar las entrevistas y asistencia a los vecinos del complejo Altos de Natania y Natania XV. En cada una de las calles de ingreso se ubicaron efectivos de la Policía de San Juan con vallados que impedían la circulación vehicular desde calle Rastreador Calivar.
Con mamelucos blancos y máscaras, el personal de Salud fue casa por casa y les indicó que debía ser testeado un miembro de la familia como muestra para detectar el virus. El testeo rápido se realizó en una serie de carpas ubicadas en las plazas principales, hasta donde las personas llegaban, hacían fila manteniendo la distancia y luego se tomaba la muestra de sangre para en 20 minutos saber si tienen o no coronavirus.
Ante este escenario, y el miedo de que el bloqueo dure más de 48 horas, algunos salieron a comprar comida y así tener reservas para hacerle frente a los días de aislamiento bajo el Plan de Seguridad ante la posible Circulación Viral, y por disposición del Comité COVID-19 provincial.
Según la información dada a conocer por el Gobierno de San Juan, el aislamiento se dio puntualmente en el barrio Altos de Natania porque ahí se detectó un caso positivo de coronavirus. En función de esto se dispuso cerrar 9 cuadras a la redonda, lo que abarcó el Natania XV.
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