Lo que era un viaje de ensueños terminó en una pesadilla. Una pareja de sanjuaninos de recién casados decidió vivir su Luna de Miel en Cuba pero las cosas se complicaron cuando quisieron volver a la provincia. Juan José Mestre y Julieta Robles se casaron el 29 de febrero pasado, cuando el coronavirus era un tema lejano y que parecía que no llegaría a Latinoamérica. Ambos ya tenían los pasajes para viajar para el 9 de marzo y así fue cómo abordaron varios vuelos con conexiones.
"Cuando fuimos el tema coronavirus era irrelevante. Había un solo caso en Argentina y como Cuba era nuestro destino, no había ningún caso. Como tiene gran medicina para nosotros era un buen destino para ir. Una vez allá estuvimos en diferentes lugares. Nos fue bien pero luego nos llegó la cancelación del vuelo. Teníamos vuelo desde la Habana a Ciudad de México, de ahí a Santiago de Chile y de ahí a Mendoza", comenzó relatando Mestre a Diario La Provincia SJ.
Sin embargo el viaje a Ciudad de México se fue complicando con la cancelación de vuelos de las aerolíneas pero finalmente este miércoles en la mañana pudieron abordar y pisar tierra mexicana. Allí quedaron varados y la empresa aérea AeroMéxico les confirmó que los pasajes a Santiago de Chile, que era el próximo destino, quedaba cancelado por el contexto mundial que se vive.
"Pudimos abordar desde Habana y eso fue un gran alivio dado que en Cuba la situación humanitaria es muy agobiante. Tienen pocos recursos, faltan medicamentos y alimentos. Cuando llegamos a Ciudad de México nos confirmaron la cancelación y no nos dieron ningún tipo de solución. Fuimos maltratados en cuanto a lo humano. Nos dejaron literalmente en la calle. Nos ofrecen vuelos que salen desde mañana o el domingo pero son muy caros, oscilan de 700 a mil dólares por personas pero sin garantías de que lleguen a la Argentina. Pueden quedar varados en Panamá o Santiago de Chile", explicó.
Luego indicó que la empresa AeroMéxico "no quiso viajar" pese a que la pareja tenía la confirmación de que a Chile podían ingresar como pasajeros de tránsito. "La empresa decidió no viajar por motivos económicos, porque si iba y volvía sin pasajeros iba a perder dinero. Decidieron cancelar todo y eso nos ha puesto en situación muy complicada a un conjunto de argentinos de diferentes puntos del país", lamentó.
Producto de esto, los sanjuaninos fueron a la embajada y recibieron la asistencia para pasar las próximas horas. Les otorgaron alojamiento en un hotel pero no les confirmaron cuál será su destino.
"Después de mucha presión logramos que entendieran la situación de que había gente que dependía de la insulina, que les quedaban por pocos días o que necesitaban fármacos para cuestiones cardíacas. En la embajada logramos que nos pudieran dar un hotel muy lindo. Nos han dado de comer y ojalá que nos puedan reubicar ya no a Santiago, sino llegar a nuestro país. Tal vez no podamos llegar a San Juan pero queremos llegar a la Argentina y hospedarnos con dinero argentino, con precios acorde a nuestros salarios. Acá estamos muy desamparados. El agua sale una barbaridad y el hospedaje es muy caro", puntualizó.
Juan José pidió a todos los sanjuaninos que se unan en oración, sin importar credo o religión para que se solucione este problema. "Estamos en esta situación que es muy desesperante, en un país extranjero, que no entendés nada. Todos te tratan de ayudar pero sin tener la posibilidad de hacerlo. Hay buena voluntad pero es muy difícil la ayuda", subrayó.
En este contexto, para la pareja de sanjuaninos como para todos los argentinos varados en México el problema hoy no es el Coronavirus sino que el dinero es un recurso que se está terminando y los gastos fuera de la Argentina son muchos.
"Sinceramente quedo en un segundo plano el coronavirus. Todos estamos orientados a llegar como sea a la Argentina. Si bien hay recaudo de limpieza de manos y barbijos en algunos casos, se mantiene la distancia en la medida que se pueda. Nos dicen que los casos no son tantos, tienen 100 y pico infectados pero son 100 millones de personas en México. No hemos visto recaudos en México en general. Si, se hace lo que se puede dada la incertidumbre, y la ansiedad de todos", finalizó subrayando que la "desesperación es por llegar".