Historia

El día que una leona se escapó de su jaula, mantuvo en vilo a San Juan y murió tras ser capturada

El caso conmocionó a San Juan en el 2012. Una leona de 15 años de edad se había escapado de su jaula y luego murió tras caer al agua del canal y ser rescatada del cuello.
lunes, 19 de agosto de 2019 13:55
lunes, 19 de agosto de 2019 13:55

La semana pasada, un caso sorprendió al país. Un puma apareció suelto en un barrio de Neuquén y el caso dejó atónitos a muchos. El animal se había escondido en una obra en construcción y cuando fue acorralado, salió corriendo entre medio de decenas de personas que se acercaron para "chusmear". Poco después el animal fue capturado y luego liberado en su hábitat. El caso recordó a lo que se vivió hace unos años en la provincia, pero aquel final fue muy diferente: el animal murió horas después de ser capturado.

El caso conmocionó a los sanjuaninos hace justo siete años. La única leona del Parque Faunístico de Rivadavia, Simba, se había escapado de su jaula y deambulado por varias horas al margen del dique del Pinar hasta que cayó al agua y sufrió la helada. Al salir fue rescatada de manera poco prolija por el personal del zoológico pero con resultados negativos porque pocas horas después darían la noticia que había muerto por hipotermia.

Nunca se conoció de quién fue la responsabilidad de que la puerta de la jaula quedara abierta y con esto se escapara el animal de ahí. Ese hecho marcó un antes y un después en el Parque Faunístico. En el 2017 se dispuso que dejara de ser un zoológico y pasar a ser un Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre, Educación Ambiental y Recreación Responsable de Rivadavia con el fin de volver a insertar los animales silvestres en su hábitat y los que no se puedan, mantenerlos con un buen cuidado.

Simba era el único animal de su especie que se conservaba en el Parque Faunístico. En julio del 2012, la leona perdió a su compañero de jaula, Capitán, quien murió por la misma vejez, tenía 26 años de vida. En agosto de ese mismo año, Simba se escapó sin rumbo fijo y quedó detenida a una orilla del cauce del canal después de haberlo atravesado nadando. Para poder recuperarla el personal del Parque le lanzo tres dardos de tranquilizante que complementado con la hipotermia le provocó la muerte. Antes de su deceso, fue sacada del lugar con sogas que le envolvieron el cuerpo y más específicamente el cuello desde donde tiraron sobre un muro de dos metros para levantarla.

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