Alberto Mattar tiene 72 años de edad, es el hermano mayor del Juez de Faltas, Enrique Mattar, y este lunes protagonizó un hecho que fue noticia no solo en San Juan sino en todo el país: salió en tanga a caminar por la Plaza de Mayo a reclamar por la prostitución en la vía pública. Tras el hecho, el hombre aseguró que fue muy difícil salir a reclamar en esas condiciones y pide que el Gobierno intervenga de inmediato para que se frene la prostitución en la zona céntrica comprendida por Caseros entre calle 9 de Julio y Córdoba.
"Fue tremendamente difícil salir así", comenzó expresando Alberto quien sobrepuso su objetivo de cambiar la realidad sobre la que vive frente a la verguenza de salir casi desnudo a la calle. El hombre, que es ingeniero agrimensor, confesó que su mayor limitante para salir a reclamar así fue su hermano que es juez de falta pero necesitaba que lo escucharan.
"Me alegro que me hayan llevado preso porque eso significa que la ley existe", señaló el hombre quien aseguró que todavía no le llegó la citación del a justicia para que se presente en Tribunales para hablar de su situación. "No tengo problema en pagar la multa que sea", agregó el anciano quien destacó que los vecinos siempre le pedían a él que impulsara a su hermano juez a que sacara esa zona roja del lugar pero "no es responsabilidad de él".
"Mi hermano no me ha hablado desde ayer pero bueno", lamentó el abuelo que tiene nietos y no se anima a dejarlos salir a jugar a la calle para evitar que entre en contacto con las personas que ofrecen sus servicios sexuales a pocos metros de la puerta de su casa.
"Desde hace mucho tiempo ando reclamando de una y de otra forma que los saque de esta zona residencial. Llamo a la policía y pregunto qué hacemos pero no hacen nada", dijo con indignación el hombre quien una vez que quedó detenido este lunes en la noche decidió radicar una nueva denuncia ya no solo contra los travestis que hacen prostitución en su cuadra sino también contra varias figuras del gobierno provincial por no accionar en contra de aquellos.
Finalmente confesó que ayer cuando salió a reclamar pensó que iba a ocurrir otra cosa: "supuse que la ley me iba a amparar y me llevaron preso". "No estoy de acuerdo con la prostitución, pero si la ley permite la prostitución, que al menos la sitúen en una zona que no sea residencial, y no en pleno centro", finalizó.
