Historia

Mamá de Benja, el sanjuanino que murió de varicela: "siento que nos da señales"

A 6 años de la partida de Benjamín, el nene de 8 años que falleció por una complicación de la varicela, su mamá, Alejandra Monardez y sus hermanitos menores lo hacen presente todo el tiempo.
viernes, 22 de noviembre de 2019 00:00
viernes, 22 de noviembre de 2019 00:00

“Yo creo que no existe la muerte, es solo un estado físico y estoy convencida de que algún día lo voy a volver a ver”. A 6 años de la partida de Benjamín, el nene de 8 años que falleció por una complicación de la varicela, su mamá, Alejandra Monardez y sus hermanitos menores lo hacen presente todo el tiempo.

Según cuenta la familia, Benja da “muchas señales” de que está, de que los acompaña, a pesar de que al comienzo fue todo muy difícil de aceptar. Durante un tiempo, Alejandra siguió sintiendo el perfume de su hijo en la casa y en medio del dolor ella volvió a verlo en sus sueños. “En un sueño me dijo: estoy bien, es un lugar hermoso ¡Te amo! Y en otro sueño, me daba un bebe, y a los pocos días me entere que estaba esperando otro hijo. Es un amor que es cuestión de almas no de cuerpos”, comentó Alejandra a Diario la Provincia S.J. 

Los hermanitos menores de Benja también lo tienen muy presente cuando juegan, por ejemplo, utilizan al mismo video juego con el cual él se entretenía y cada vez que pasan un nivel, exclaman “a este nivel lo pasó el Benja”. También les quedó de recuerdo sus juguetes, y sus enseñanzas, ya que al ser el hermano mayor, aprendía todo primero. 

Alejandra conserva casi todas sus cosas: “Yo me deje todo de benja y nunca pude desarmar su cama. Al año siguiente nació mi otra hija y ahora ella duerme allí. Hay cosas que se han necesitado y bueno, con mucho dolor los he dado. Yo sentía como que estaba dando un pedacito de él, pero si estas ayudando al alguien que realmente lo necesita, está bien. Hay que saber que son cosas materiales, pero que uno tiene un apego especial”. 

Para la familia, Benjamín era y sigue siendo un niño muy especial, tranquilo, bueno y educado y así lo recordaron durante la misa por el 6° aniversario de su partida. “Lo que me queda hacer por él, es seguir y continuar por mis otros hijos, rodeada de la gente que me quiere y me da fuerzas para continuar”, señaló la mamá. 

El caso de Benjamín 
En la noche del viernes 4 de octubre de 2013, Benjamin le dijo a su mamá que “tenía algo en la axila”, era una ampolla de líquido. Al día siguiente Alejandra lo llevó al médico, le diagnosticaron varicela y le dieron 7 días de reposo. En la noche de ese mismo sábado llegó una amiga médica de Mendoza a la casa de la familia y revisó a todos los chicos, solo Benajmin tenía varicela.

El lunes 7 de octubre, la mama fue a llevar el certificado a la escuela y se enteró que había varios chicos afectados. Los 7 días dispuesto por el médico le parecieron pocos y pensó que podría poner en riesgo a los demás niños, por lo que fue a otro médico, (el tercero) y le dijo que: “que estaba bien porque en realidad la varicela se contagia desde 72 horas antes de la primera erupción”.

Los síntomas que tenía benjamín era la garganta muy irritada por las ampollas, vómito y fiebre alta. Los médicos le dijeron que era normal por el cuadro que presentaba, y Alejandra comentó “viste cuando llevas a tu hijo al médico y te dicen: cualquier cosa me lo traes ¿qué es cualquier cosa? Por qué no dicen más de 39° de fiebre o que después de 3 días tener que llevarlo de nuevo. Mi hijo tenía más de 39°”.

En la madrugada del miércoles 9 de octubre la madre lo había medicado por su estado febril y a las 5:30, Benjamín se levantó al baño y se demoró adentro, por lo que Alejandra presintió que algo andaba mal. El niño ya no tenía control sobre sus necesidades y además presentaba manchas negras en sus piernas. Alejandra lo lavó y lo cambió de ropa para llevarlo al sanatorio. Mientras caminaban del pasillo hasta la puerta de salida de la casa, Benjamín se iba quedando sin fuerzas, sin habla y se iba doblando: “era como que se iba apagando de a poco”.

Llegaron al sanatorio y al niño lo acercaron en silla de ruedas porque ya no podía caminar ni hablar. La doctora le dijo que fuera a firmar los papeles para poderlo internar porque él necesitaba oxigeno urgente. Alejandra se fue por un lado y Benjamín por otro, en ese momento el niño gritó “mamá, mamá” y ese fue el último recuerdo que tiene esta madre de su hijo con vida, porque casi inmediatamente le dio un paro y ya no salió.

Benjamín falleció de una encefalitis producida por la baja de defensas que le ocasiono la varicela. “Es un caso que ha sido totalmente evitable yo a todos mis hijos los tenía con todas las vacunas y esa vacuna no estaba en el carnet. Yo pensé que mis hijos estaban protegidos contra todo y no lo estaban. Y tuve que pasar por esto”, finalizó Alejandra. 
 

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