Itatí De La Vega comenzó en 2015 con un emprendimiento que le permite reutilizar las cañas de los pastizales, que todos los años generan cientos de incendios y convertirlas en cubiertos biodegradables. Con todas las fichas puestas en el proyecto, este 2018 comenzó a exportar sus productos de caña a varias provincias de Argentina.
"En mayo de este año registré mis inventos con el nombre de "BioIta" y eso me generó la buena energía para que todo comenzara a fluir. A través de viajes que hice y también por internet, conocí a empresarios y otros emprendedores que decidieron adquirir mis productos por lo que ahora estoy exportándolos a varias provincias, todo eso en sólo 5 meses", contó la emprendedora Itatí De La Vega a Diario La Provincia.
Fuerte y luchadora como pocas, Itatí es ingeniera agrónoma y mamá de los pequeños Máximo y Pía, su creatividad no sólo le permite fabricando de manera artesanal cubiertos de caña, sino también otros utensilios de cocina como cucharas, difusores de café o té, mates con bombillas, sorbetes y hasta palitos de sushi, todo del mismo material.
"Mendoza es el mayor cliente. Me acaban de solicitar 20000 unidades para un evento. Buenos Aires. Salta. San Luis son las otras provincias que apostaron en mí y lo siguen haciendo. Aunque todo es de manera artesanal, ante esta situación no me quiero explayar más porque no tengo mas capacidad productiva hasta que compre la máquina", detalló.
Y agregó que "mi objetivo principal con los cubiertos y utensilios de caña es que en algún momento lleguen a reemplazar al plástico que tan caro cuesta y tan daño hace. De la mano de esto día a día trabajo para bajar aún más el costo y que mis productos puedan adquirirlos todos", dijo la joven.
Detallista y perfeccionista como pocas, Itatí envía sus productos grabados según los requerimientos que le hacen. Dibujos, flores y palabras acompañan los diseños de caña que convierten regalos, souvenirs o bien el uso típico de cubiertos de diferentes materiales, en una práctica segura y ecológica.
"Por mis hijos y para crear conciencia en la sociedad sobre el porcentaje de contaminación que producimos año a año, siento que los cubiertos de caña son una opción y una solución al uso del plástico. En San Juan es algo que se da de forma muy común y siempre la caña termina tirada o quemada, convertirla en productos prácticos para usar es lo que me encanta y lo que mejor me sale hacer", concluyó la joven.
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