Un pintor joven que busca inspiración para crear una obra sobre la independencia despertó "1816, el grito sagrado", el eje del espectáculo final de la Fiesta Nacional del Sol.
Ante un autódromo El Zonda Eduardo Copello colmado de público, las canciones de Charly García y Sui Géneris como "Promesas sobre el bidet", "Chipi chipi", "El tuerto y los ciegos", "Bienvenida Cassandra", "Fanky" y "Inconsciente colectivo" marcaron cada cuadro de la puesta en escena.
Nahuel, el personaje principal, fue descubriendo los distintos significados de la libertad a lo largo de la historia, desde la abolición de la esclavitud a la persecución por pensar distinto, puesto de manifiesto en la quema de libros.
Con un despliegue importante de bailarines y la aparición de un barco gigante, el escenario se fue transformando en campos de batallas y de búsquedas de la independencia y autonomía.
El espectáculo tuvo su punto cumbre con la entrada en escena de un escudo argentino humano que, desde lo alto, interpretaba el Himno Nacional Argentino, también en versión de Charly García. Con un show de fuegos artificiales se encendió la noche sanjuanina que despidió otra edición de la Fiesta Nacional del Sol, a pura emoción del público.
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