sábado, 5 de septiembre de 2015
11:01
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Ubicado en calle Félix Aguilar, frente al Parque de Mayo, ha quedado casi disimulado tras los stands del paseo de artesanos, sin embargo, el Boletín Oficial continúa trabajando como hace casi un centenario. En 1916, abrió sus puertas con el objetivo de informar a toda la población sobre las nuevas normas, y hoy continúa con esa labor con más compromiso que nunca.
Desde el 2009 se lo puede consultar en forma online en el mismo día de su publicación. "Hemos tratado de mejorar la calidad de impresión, y la información. Tuvimos la posibilidad de ponerlo en Internet., y lo más importante es que quien lo necesite puede buscar online el boletín que lo necesite y lo puede descargar para imprimir, cosa que muchas provincias no se puede hacer”, contó a Diario La Provincia su director, Fernando Conca.
El edificio está dividido en dos partes, una que es la del Boletín Oficial propiamente dicho en donde se publican todos los actos de gobierno, "en eso tenemos que tener mucho cuidado, porque todo lo que decimos entra en vigencia; leyes, decretos, licitaciones, edictos, expropiaciones y trámites sucesorios. La otra parte es de imprenta, y trata de satisfacer todas las necesidades de los organismos del estado”, contó el funcionario.
Más cambios
Luego de los terremotos, se fueron perdiendo publicaciones que eran importantes para la historia local. "Hicimos un convenio con la Biblioteca del Poder Judicial. Como nosotros teníamos un archivo de las publicaciones, lo que nos sobraba se lo dimos a la biblioteca, y lo que nos faltaba ellos nos lo dieron. Con el transcurso de los años, y sobre todo después del terremoto, se perdieron muchos boletines. Además hicimos un convenio con la Universidad, que nos brindó un nuevo programa que posibilitó que el boletín saliera temprano. A las 10.30 u 11 ya lo subimos a Internet”, agregó el director quien ya lleva 10 años en su cargo.
"Lo más importante es que hemos reemplazado las tintas por elementos más ecológicos, ya que los antiguos vapores de plomo que se expedían eran muy perjudiciales para la salud de los trabajadores. Hemos eliminado casi un 90% la contaminación, y lo que queda es por los solventes que se usan para limpiar. Pero no es más que lo que uno utiliza en su casa al pasar un lampazo. Hemos hecho lo humanamente posible para que sea saludable”, finalizó Conca.