"Que nunca falte el trabajo". Esas fueron las palabras que se sucedieron una y otra vez de la boca de decenas de fieles que caminaron en honor a San Cayetano en Trinidad. Pasada las 19.30 la procesión partió de la puerta de la parroquia y se sucedió entorno a la plaza de la localidad donde la gente llegó en familia para pedirle y agradecerle al patrono del Pan y del Trabajo.
La procesión, que contó con gente de todas las edades pero muy especialmente con adultos, se desarrolló con cánticos y oraciones y finalizó con una misa en su nombre.