Este domingo, las calles del microcentro resplandecieron de color y música en honor a la Virgen de Copacabana. Decenas de delegaciones bolivianas provenientes de San Luis, Mendoza, Córdoba y Buenos Aires se unieron a las agrupaciones sanjuaninas para rendir honores a la patrona de su país.
La imagen, que desde hace 30 años está en San Juan, fue la convocante en la Catedral donde se desarrolló una ceremonia desde las 12 que luego se coronó con una fiesta por las calles. Con mucho color en las vestimentas y movimiento en los cuerpos, los bailarines se desplazaron en procesión desde Avenida Ignacio de la Rosa hasta calle Santiago del Estero.
Al finalizar la procesión la música y el color se hicieron nuevamente presentes para agradecer a la Virgen por los dones recibidos en este año.