El 7 de julio de 2012, Cristina Olivares moría víctima de 140 puñaladas. El hecho conmocionó a la provincia y como consecuencia quedaron dos niños, que hoy tienen menos de cinco años, sin padres. A casi dos años de aquel hecho, la familia de Cristina aseguró que los niños no quieren saber nada con Miguel Ángel Palma, ex esposo de Olivares y padre de los menores. Tal es así que el mayor de los dos, el de 5 años, no responde en la escuela cuando se lo llama por Palma y por eso pedirán cambio de apellido.
"Los niños no quieren saber nada con el papá. En la escuela cuando lo llaman por el apellido del padre, Palma, no contesta. Por eso queremos sacarle la patria potestad y cambiarle el apellido. Es difícil, tarda un tiempo pero sabemos que sí se puede hacer", señaló Antonio Olivares padre de Cristina quien subrayó que quieren "sacarle el apellido Palma y dejarle el apellido Olivares. El más grande tiene cinco años y no quiere saber nada, no porque le hayamos dicho algo en contra de él sino solamente por escuchar cosas de cómo era su papá".