jueves, 12 de septiembre de 2013
20:03
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Después de varias reuniones, de propuestas y de incertidumbres, los vecinos del barrio RIM 22 de la Villa de Calingasta permanecerán en sus casas mientras se realiza el operativo de limpieza de escombros de las sulfateras de aluminio que se encuentran en las cercanías del lugar.
En un primer momento, el intendente Raúl Garcés manifestó que una consultora nacional, encargada de realizar el trabajo de remoción de las montañas de desechos de las sulfateras, recomendó el traslado de 27 familias hacia otra zona en forma definitiva.
Allí comenzó el conflicto que se agudizó a fines de la semana pasada, cuando los vecinos decidieron que no abandonarían sus viviendas. Muchos de ellos llevan viviendo entre 17 a 25 años allí y rechazaron la posibilidad de trasladarse a un nuevo barrio a construirse en Alto Verde.
"La consultora quiere sacar las casas para que poder trabajar y forestar las escombreras. Hace 18 años que vivo en el barrio RIM 22 y no me voy a ir, pienso seguir luchando por mi casa.Es muy difícil empezar de nuevo. Estamos todos decidimos a seguir luchando. No nos vamos a ir", afirmaba Silvia a Radio Manantial.
Después de una nueva reunión con Garcés, este jueves los calingastinos fueron notificados de otra decisión. "Vino el secretario de Obras, Manuel Pandolfini, acompañado de un ingeniero y nos explicaron que podrán hacer los trabajos sin necesidad de que dejemos las casas. De todas formas, continuaremos reuniéndonos con los vecinos para evaluar cómo sigue todo", comentó a Diario La Provincia, Julio Jofré.
Un problema de décadas
A orillas del río Calingasta y muy cerca de las casas de Villa Calingasta hay una gran cantidad de pizarra proveniente de las empresas que décadas atrás explotaron el sulfato de alumnio. Según estadísticas nacionales, a orillas del río hay aproximadamente 2,3 millones de toneladas de desechos.
La Nación destinará parte de 72 millones de pesos, que ha conseguido en convenio con el BID, para mitigar la contaminación de residuos provocados por actividades mineras que cesaron hace más de 10 años cuando no existía la legislación vigente que hoy las regula. Entre las provincias beneficiadas está San Juan y más precisamente, Calingasta.
Los depósitos de estéril de las plantas sulfateras que se busca mitigar están ubicados en la ribera de los ríos Los Patos y Calingasta. Son 17 pilas con volúmenes que van desde los 14.000 a los 400.000 metros cúbicos y tienen una altura de entre 6 y 17 metros.
Con los resultados de la etapa de investigación, que se sumarán a estos datos, los especialistas podrán saber si es necesaria la estabilización física de las inclinaciones de las escombreras. Y también si es posible la revegetación de la superficie para otros fines económicos. También se plantea la posibilidad de obras de impermeabilización y defensa ribereña de todas las escombreras.
