Cambio de bebés

Verónica Tejada: "Fueron 20 días de felicidad con mi bebé y de un día para el otro me dijeron que no era mi hija"

Verónica es una de las mujeres que sufrió el intercambio de bebé en una clínica privada. Ella nunca sospechó que la nena que tenía no llevaba su sangre. Fue Lorena Gerbeno, la otra madre, la que intuyó el cambio.
miércoles, 23 de octubre de 2013 00:47
miércoles, 23 de octubre de 2013 00:47

El caso conmovió a todos los sanjuaninos y hasta llegó a tener repercusión nacional. Dos madres sufrieron el cambio de sus hijas al nacer en una clínica privada y todo llegó a re-establecerse cuando la intuición de una de ellas la llevó a realizar un ADN con su bebé. María Lorena Gerbeno y Verónica Tejada fueron las dos mujeres víctimas de este cambio.

"Cuándo me iba a imaginar o poner en duda algo así. Uno confía plenamente que el bebé que te entregan es tu hijo. Nunca tuve la duda de que así no lo era", expresó Verónica quien vivió con la bebé, que le habían entregado, días de plena alegría. Esa nena era su hija pero no de sangre sino de corazón.

La historia comenzó a escribirse el lunes 30 de septiembre pasado. Ambas tuvieron familia casi en la misma hora y de hecho se conocieron y cruzaron palabras antes de dar a luz. Luego el destino volvió a unirlas el viernes de esa semana, en la sala de espera de la clínica privada. Las mujeres conversaron y sin pensarlo, esa charla sembró la semilla de duda en una de ellas.

"Cuando nace me la muestran de costado, yo estaba feliz de la vida, y se la llevan. Después vino la enfermera y me dice 'has tenido una nena hermosa de 3,100 kg'. Cuando salgo del quirófano le digo a mi marido, con señas, que había tenido una beba de 3,100 kg. Después mi marido va al lugar donde está y cuando vuelve me dice, 'no, pesa 3,800 kg'. Entonces me pregunto qué pasó, habré escuchado algo mal. El viernes cuando vuelvo al Sanatorio Argentino para hacer control de rutina a la gorda, me encuentro con ella (señala a Verónica) que estaba atrás mio y me dice 'te acordás de mi, yo tuve familia el mismo día que vos'. La miro y le digo 'que bonita la gorda' y me dice 'sí, he venido porque le hice unos estudios porque tiene la bilirrubina alta'. Cuando me voy le pregunto cuánto pesa, porque se veía muy grandota y me dijo 3,100 kg. Me voy todavía sin caer, cuando me levanto de dormir la siesta, digo: 'ésta es mi bebé' y me largué a llorar. Entonces dije 'me cambiaron la bebé', 'me cambiaron la bebé'. Tenía sentimientos encontrados. Entonces me hice el ADN inmediatamente y a la semana me confirman que la nena que tenía no era mi hija, y empecé toda la medida judicial para lograr saber quién era la madre que tenía mi hija", explicó Lorena. 

Por su parte, Verónica vivió días que recordará siempre como hermosos. "Fueron 20 días de felicidad con mi bebé, luego fue muy duro porque de un día para el otro me dijeron que no era mi hija. Todo había transcurrido de manera normal hasta que el martes 15 cuando vinieron del Sanatorio Argentino a notificarme de lo que estaba pasando, que tenía que presentarme al Juzgado", señaló con dolor Verónica quien explicó que ese día del cambio a ella le habían dicho que "iba a tener una beba grande por lo que indicaba la panza y la ecografía".
 
"Cuando nace la gordita me dice el doctor que es una gringa larga, relarga que pesaba 3,800 kg pero cuando vamos a la habitación nos entregan a la bebe, era una cosita chiquitita. No era una beba de 3,800, ni gringa, ni larga", recordó la madre quien tiene otra hija que aquel día, cuando le confirmaron la no maternidad sobre la nena que tenía, escuchó todo lo que pasaba y no para de preguntar qué sucedió, sufrió un golpe emocional muy fuerte. Actualmente ella ya piensa en encarar una terapia profesional que la ayude a superar este momento. "El daño fue terrible e irreparable", sentenció.
 
Ahora viene otra etapa muy dura que será la Penal. Ahora esperan la respuesta de la investigación y que se recaben todas las pruebas para ver si hay o no delito. Luego se seguirá con la actuación. En materia civil todavía no han hablado el tema porque ahora lo que más quieren es disfrutar a sus verdaderas hijas.

 

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