El presidente Alberto Fernández se metió en el conflicto entre San Juan y La Rioja por el proyecto minero de Josemaría. El gobernador de la vecina provincia había expresado en más de una oportunidad la necesidad de hablar la posibilidad de que La Rioja se beneficie con lo que genere el proyecto minero que está en San Juan.
Al respecto, el presidente de la Nación hizo referencia a sus raíces riojanas pero señaló que hay que respetar la ley. "Soy hijo de un riojano, quiero mucho a La Rioja y tengo un amor entrañable. Papá que era riojano se fue a vivir a Buenos Aires cuando tenía 12 años para estudiar en el Nacional Buenos Aires", comenzó expresando en el discurso que brindó ante funcionarios sanjuaninos e intendentes en Quinta Nazareno.
Luego agregó: "cruelmente nos traía en el verano de vacaciones a La Rioja. Con lo cual conocí a La Rioja de los 50 grados, aún así amo a La Rioja, la amo tanto como a la constitución. Amo mucho a la constitución, la apoyo y respeto. La constitución es muy clara, los recursos naturales son de la provincia. Ahora los hermanos riojanos tienen que ver cómo ayudan a ese desarrollo porque tal vez puedan ganar algo con ese desarrollo y hasta puedan realizar su política constante de mucho tiempo de ser crítico de la minería".
"Cuando la minería se explota responsablemente y con acuerdo social tiene sentido", agregó Fernández y subrayó que "si la minería no existiera nada de esto existiría", en relación a todo lo que surge de la minería.
