La fábrica de galletas Tía Maruca (exDislexis y exPesico) atraviesa una compleja situación por estos días. Es que los empleados vienen percibiendo un atraso en el cobro de las quincenas e incluso del medio aguinaldo, que tendrían que haber recibido en junio pasado.
La empresa tiene 400 puestos de trabajo y han rescindido cerca de 50 empleados contratados, pertenecientes a los grupos de trabajadores temporarios. "Hay que manejarse con prudencia para que la empresa no cierre las puertas. Se está apostando a que se siga manteniendo la firma. Hay muchas familias viviendo y lo que sufren es atraso salarial, falta de pago por ahora y la baja de algunos contratos de temporada normales en esta época. No ha habido despido de trabajadores permanente que nos da tranquilidad por el momento", señaló Roberto Correa Esbry en AM1020.
Por su parte, desde el sindicato de la alimentación indicaron que los salarios vienen cobrándolos fraccionados desde inicio de año.
La fábrica de galletitas comenzó su negocio a finales de la década del ‘90, fue golpeada por la crisis del 2001 y volvió a florecer en 2004. Ya en 2016 creció un 32 por ciento en su capital y facturó 400 millones de pesos, según información publicada por El Cronista.
La planta que Tia Maruca tiene en Albardón, a 12 kilómetros de San Juan capital, perteneció anteriormente a la principal productora de alimentos del país en la década del ‘60, llamada Sasetru. Luego de permanecer cerrada durante 20 años, la firma Dilexis (propiedad del ex dueño de Fargo) la volvió a poner en marcha hasta que la multinacional Pepsico la adquirió en 2011.