En noviembre pasado, un sanjuanino identificado como Armando David Quiroga Ovalle (27), fue detenido en Albardón después de protagonizar un intento de robo, agredir a policías e intentar huir en un patrullero. Posteriormente, se conoció que el imputado es prófugo de la justicia de Santa Cruz, donde cumple una condena de casi 20 años de prisión por homicidio.
Tras la investigación del hecho, la justicia ajustó la calificación de la causa a coacción, hurto en grado de tentativa, resistencia a la autoridad, robo agravado por causar lesiones en grado de tentativa, todo Conjugado por las Reglas del Concurso Real, y este martes fue condenado.
Según se conoció, se resolvió mediante Juicio Abreviado condenar al imputado a la pena de 4 años y 2 meses de prisión de cumplimento efectiva. Con la unificación de pena, totalizó una condena de 23 años y 10 meses de prisión de cumplimiento efectiva.
La aprehensión del hombre ocurrió el martes 8 de noviembre cuando un vecino de Albardón, que vive en las inmediaciones de calles Mitre e Independencia, denunció que un hombre ingresó al garage de su vivienda y se llevó una moto Honda BROS NRX 125. De inmediato, el damnificado lo persiguió y logró recuperar su vehículo tras discutir con el hombre.
Una vez que regresó a la casa, advirtió de lo sucedido a un efectivo policial que ya buscaba al malviviente y que posteriormente lo divisó a unos metros del lugar. Allí, el policía entrevistó a tres hombres, siendo uno de ellos el protagonista del intento de robo, quien se ofuscó e intentó huir, siendo detenido a escasos metros.
En ese momento, el sospechoso comenzó a lanzar golpes de puño y patadas que impactaron en el cuerpo del personal policial, causándoles lesiones. Minutos después llegaron refuerzos policiales y lograron la reducción de Rosales, mientras que los otros dos sujetos treparon a los techos y desde allí arrojaron botellas de vidrio al personal policial, logrando huir. En tanto que el aprehendido fue ingresado esposado en el móvil policial.
Mientras se estaba llevando adelante el procedimiento de rigor, el aprehendido no dejaba de proferir insultos y agresiones verbales a los presentes, en especial al personal policial, hasta que en un momento comienza a dar fuertes golpes con su cabeza a la ventanilla trasera derecha del móvil policial, por lo cual el Agente Navarro (que se encontraba al volante del mismo), desciende, da la vuelta y abre la puerta trasera derecha, procediendo a bajar el vidrio mientras le decía a Rosales que se calmara.
Abierta la ventanilla, cierra la puerta y es en este instante que advierte que el detenido se había soltado de una de las esposas, específicamente la del lado derecho, se incorpora pasando entre los asientos delanteros y procede a accionar el cierre centralizado, trabando todas las puertas del automóvil y se sienta en el asiento del conductor, apoderándose por completo del móvil policial.
Navarro advirtió la situación e intentó abrir las puertas del lado derecho, lo cual le fue imposible por lo que ingresó al auto por la única ventanilla abierta, mientras que el móvil fue rodeado por personal policial que le gritaba a Rosales que depusiera su accionar. El malviviente aceleró el vehículo y salió violentamente marcha atrás perseguido por los efectivos policiales, dando un giro de ciento ochenta grados en el espacio que se genera en la unión de las calles.
En ese momento, cuando estuvo a punto de llevarse el móvil policial, el Agente Navarro, quien iba forcejeando con Rosales dentro del vehículo, consiguió alcanzar la llave de contacto y detener el motor del vehículo. Además, abrió el cierre centralizado, lo que permitió a los demás policías proceder a la reducción de Rosales que no dejaba de agredirlos con golpes de puño y patadas.
Una vez que el detenido se encontró en aparente estado de calma fue trasladado al Hospital departamental de Albardón, donde nuevamente se descontroló, insultando y escupiendo al personal médico, por lo cual debió ser trasladado a los calabozos de la Comisaría 18º, sin concretarse las curaciones correspondientes.
El atroz homicidio que cometió "Hulk" en Santa Cruz
Según se conoció por medios de la provincia sureña, Quiroga Ovalle apodado "Hulk", purgaba una pena de 19 años por un homicidio que cometió en 2018 junto a otro sujeto en Pico Truncado y en agosto de 2022 se fugó desde el Hospital Zonal de Caleta Olivia.
Diario El Patagónico informó que el sanjuanino huyó después de haber sido operado de hemorroides y tras la cirugía, se escapó. Sobre el asesinato que cometió, se detalló que ocurrió en marzo de 2018, cuando en compañía de Juan González, asesinó a balazos a Daniel Gómez en la localidad de Pico Truncado.
"Ambos fueron juzgados por un tribunal de la Cámara del Crimen de Caleta Olivia que en abril de 2019 condenó a González a una pena de 14 años de prisión por ser partícipe necesario del crimen y, a Quiroga Ovalle, a 19 por haber sido el autor de los disparos", detalló el medio.
