El pasado 5 de agosto, un amplio operativo se desplegó en Caucete, donde un hombre quedó detenido tras el hallazgo de más de 400 kilos de carne sin poder justificar procedencia, armas y municiones. Tras la audiencia de formalización en Flagrancia, el imputado de apellido Gil no llegó a un acuerdo de juicio abreviado por el delito de "Tenencia de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal", y fue a juicio y por Fiscalía actuó Cristian Catalano.
Este jueves se llevó adelante el proceso y fue condenado a 2 años de prisión en suspenso y deberá abonar una reparación simbólica de $500.000. Será destinada a dos entidades que trabajan en favor de los chicos con cáncer: FundaME ($200.000) y Asociación Civil Guerreros por la Vida ($300.000).
Sobre el caso, según informaron fuentes judiciales, aproximadamente a las 13:00 horas del viernes 5, un grupo de policías de la Unidad Rural N° 3 de Caucete, en compañía de la Jueza de Paz del departamento, realizaron un allanamiento de un domicilio ubicado en calle La Plata y Rastreador Calivar.
Allí encontraron que funcionaba un hotel alojamiento clandestino y la venta de carne sin la debida autorización de los organismos pertinentes.
En el procedimiento, los uniformados se dirigieron a una de las habitaciones, la cual era utilizada por el aprehendido para pernoctar, y en un rincón de la misma encontraron apoyados a una mesa de luz, dos armas de fuego y municiones varias.
Al ser consultado, el propietario informó que no contaba con los permisos para la tenencia de dichos elementos. En razón de ello se lo aprehendió.