El lunes al mediodía, un estudio de contadores fue el blanco del ataque de delincuentes en Capital. Tras un operativo, uno fue detenido. Hoy, recibió una dura condena en la justicia.
Por el delito de "Robo agravado por el uso de arma de fuego apta para el disparo y por ser cometido en poblado y en banda", se condenó a 7 años de prisión de cumplimiento efectivo a Jonathan Fernández. Asimismo, se ordenó el decomiso del arma de fuego secuestrada y se enviaron actuaciones al Juzgado de Instrucción para investigar a presuntos coautores.
Sobre el caso, el estudio se encuentra en el segundo piso de un edificio por calle Jujuy entre calles Rivadavia y Laprida (Capital). Al mediodía del lunes, se encontraba en su interior un contador trabajando junto a un amigo. A su vez, dos clientes tocaron el portero eléctrico y subieron al estudio contable.
Cuando les abrieron la puerta a los clientes, detrás de ellos, aparecieron otros dos sujetos y uno, a punta de pistola procedió a reducir a todos. Amenazando a las víctimas, los delincuentes sustrajeron dinero en efectivo (al contador unos quinientos dolares billetes estadounidenses y otros doscientos dólares de las misma moneda extranjera a uno de los clientes), además de los teléfonos celulares de alta gama (un Samsung Note 10 del contador y un Iphone 11 al cliente).
Luego de ello, y tras golpear a uno de los clientes en la cabeza, los delincuentes encerraron a las cuatro personas en el baño del estudio y luego huyeron
Una vez en la vereda de la calle Jujuy, los asaltantes se juntaron con otro cómplice que se quedó haciendo las veces de campana en el lugar. Pero no tuvieron en cuenta que justo en ese momento una movilidad policial circulaba por allí. Los sujetos, al advertir la presencia policial se pusieron nerviosos y apuraron el paso. Eso llamó la atención de los uniformados, quienes intentaron entrevistarlos.
Al descender uno de los uniformados del vehículo policial y acercarse a los sujetos, los mismos emprendieron huida por separado. Emprendieron persecución de uno de los delincuentes, por calle Jujuy hacia el cardinal sur, doblando por calle Rivadavia hacia el este. El policía no le perdió pisada al tiempo que se sumó a la misma un individuo en moto que trabaja por la zona.
La corrida continuó por calle Rivadavia, doblando el delincuente por calle Aberastain, mientras se solicitaba apoyo por equipo policial.
El hombre en su huida arrojó el alma de fuego que llevaba consigo como así también una campera tipo buzo de color gris claro usada en el asalto. Ingresó a un estacionamiento ubicado por calles Aberstain y Laprida y de allí trepó por los techos. A ese entonces, otros efectivos policiales llegaron en colaboración y tras subirse por los techos, lograron la aprehensión del delincuente.
Arribaron los Ayudantes Fiscales como así también el Fiscal titular de la UFI 1 de Flagrancia a los fines de dirigir el procedimiento investigativo respectivo.
El aprehendido resultó es un joven de 25 años de apellido Fernández, lográndose recuperar los dos teléfonos celulares de las víctimas que fueron descartados por el delincuente en su huida como así también se secuestró el arma de fuego empleada para cometer el atraco y la campera buzo color gris.
Luego del peritaje balístico de rigor se acreditó que el arma de fuego, marca Italo Grau, calibre .22 corto, color plateada y sin cachas, resultó ser apta para el disparo.
Una vez concluido el procedimiento en el lugar de aprehensión, Fernández fue trasladado a sede de Comisaría 3º. Al serle realizado la requisa en los calabozos se le halló entre su ropa interior un billete de cien dólares estadounidense que había sido previamente robado.
