Un fuerte estruendo desconcertó a una familia en su caso del barrio Las Talas, en el departamento Caucete. Un auto se incrustó en una de las paredes del comedor, esta madrugada.
Se trató de un auto Ford Falcon, guiado por un menor de 17 años que, por causas que se investigan, perdió el control del rodado. Más allá de los daños materiales, el chico no requirió atención médica.

Su papá de 40 años llegó al lugar y se puso a disposición de la Comisaría 9º, que lleva las medidas de rigor.