Este jueves, la justicia condenó a Diego Espejo por el crimen de Oscar Mura, el joven policía que fue ultimado de varios disparos cuando dormía en su departamento de Chimbas en marzo pasado.
Espejo era su pareja y fue condenado por el tribunal conformado por el juez Federico Rodríguez, en calidad de presidente, y por las doctoras Gema Guerrero y Ana Lía Larrea, como vocales. Sobre él recayó la condena de prisión perpetura por ser considerado culpable del Homicidio doblemente calificado, por ser una persona con la cual mantenía o ha mantenido una relación de pareja, y alevosía.
La lectura de los fundamentos de la sentencia serán el 17 de diciembre del corriente año, a las 12 horas, quedando las partes notificadas en este acto.
La investigación permitió reconstruir lo que habría ocurrido aquel día clave del crimen. Para ello fueron fundamentales las periciales que determinaron y acreditaron cómo sucedieron los hechos sobre todo la forma de cómo se cometió el asesinato, considerado por la fiscalía con alevosía.
De acuerdo a lo que trascendió, luego de tener relaciones sexuales, Diego Espejo desde el pie de la cama le habría disparado a Mura que estaba semi-dormido en la cama. Todo fue en posición de pie. En el lugar le habría disparado 4 veces a quemarropa hasta que el arma quedó trabada por el mecanismo interno.
Espejo, el día del crimen, fue encontrado con el arma homicida en las manos y frente a él su ex pareja ya muerto.
