El domingo en la noche, un brutal choque en Rawson se cobró la vida de una joven de 22 años. Su nombre era Sasha Flores quien iba en moto con un joven de 24 años y fue embestida por un auto cuyo conductor fue puesto ante el juez este miércoles en la audiencia de formalización de la investigación penal preparatoria.
El hombre, Cristian Aníbal Muñoz, fue imputado por el delito de Homicidio Culposo Agravado por el exceso de alcohol en sangre en concurso ideal con lesiones culposas. Luego el juez ordenó la libertad que se hará efectiva una vez que pague una caución real de 400 mil pesos. Además el juez le impuso la obligación de presentarse cada 15 días ante la OMA y no podrá salir sin autorización del territorio provincial.
En la ocasión el Ministerio Público Fiscal informó que entendió que el imputado había tenido una conducta "desaprensiva que condujo con suma imprudencia, de forma intempestiva, sin colocar su guiñe, se introdujo en el carril contrario y no dio ninguna posibilidad de maniobra" al conductor de la moto.
Luego la fiscalía agregó: "en todo momento actuó bajo los efectos de una intoxicación alcohólicas, además debe utilizar anteojos recetados, los testigos manifiestan no haberlo visto con los anteojos puestos. En ningún momento auxilió a las victimas. Esa total indiferencia da por acreditado el elemento subjetivo del dolo".
Ante esto el Ministerio Público Fiscal solicitó la prisión preventiva contra el imputado por el plazo de 3 meses porque consideró que todo "hace presumir peligro de fuga y entorpecimiento de la investigación".
Sobre esta idea, la querella adhirió a lo manifestado por el Ministerio Público Fiscal y se manifestó de acuerdo con la calificación legal Homicidio Simple con dolo eventual en concurso ideal con lesiones graves,
Por su parte, la defensa del conductor del auto consideró que el delito que debe caer sobre él es el de Homicidio Culposo Agravado por los efectos del alcohol, que conlleva una pena menor (de 3 a 6 años), es decir, que se trata de un delito excarcelable. Además agregó que no existe peligro de fuga ni evasión.
Ante este escenario, el juez consideró que la calificación que hizo el fiscal en su formalización es "irracional" y que "es inviable jurídicamente". Esto radica en que el fiscal consideró que hubo dolo eventual, en el conductor del auto. Es decir hubo un homicidio con intención de matar. Y luego se contradijo cuando consideró que en el caso de la víctima que sobrevivió, Aballay, "el delito es culposo, es decir lesiones culposas". "Entonces aquí radica la inexistencia jurídica del planteo del fiscal", señaló el juez.
"Cómo podría el acusado haber actuado con Dolo Eventual para la muerte y en el mismo hecho, en la misma acción, en el mismo tiempo y lugar, es decir en el mismo instante donde se habría ocasionado el accidente, también obró con Culpa, es decir sin intención deliberada pero con imprudencia", señaló el juez y subrayó: "tal hipótesis jurídica hecha por el fiscal es inexistente jurídicamente, por lo tanto jamás podría prosperar ya que o actúa con dolo o con culpa, al menos en la hipótesis del presente caso".
