Las calles de General Roca se llenarán de fotos y del nombre de Stella Maris Vega, la sanjuanina que murió hace un año y un mes tras las complicaciones por una presunta mala praxis en una ligadura de trompas, tras tener a su tercer hijo. Esto ocurrirá este viernes en una caravana de vehículos que recorrerá la ciudad pidiendo justicia.
“Con todas las medidas de prevención correspondientes a la pandemia, marcharemos en caravana de vehículos para exigir justicia y que este hecho no quede impune. Para que no le suceda a nadie más”, manifestó Víctor Álvarez, el esposo de Stella Maris a través de su cuenta de Facebook.
En cuanto al proceso judicial, ya hubo acuerdo en el fuero civil, pero aún continúa la causa en lo Penal.
El sustento probatorio con que cuenta la Fiscalía, a cargo de Luciano Garrido, para esta instancia procesal es, entre otros, la denuncia penal realizada por la pareja de la víctima, la autopsia realizada por el Cuerpo de Investigación Forense, las copias de los estudios de laboratorio e historia clínica y el informe de revista respecto de la condición de médicos de los imputados, señaló el diario LMNeuquén.
Ahora, está fijada para el jueves 13 de agosto una audiencia de Control de Acusación aunque, atento a la prórroga solicitada por la defensa de los médicos imputados, la misma podría ser diferida.
El caso
Stella Maris, oriunda de San Juan, tenía 37 años de edad, pero vivía en Roca desde hacía casi 6 años junto a sus tres hijos de 1, 3 y 6 años y su esposo, Víctor Álvarez. El 10 de julio del 2019 se internó en el nosocomio para someterse a una operación de ligadura de trompas, a través de una laparoscopía.
La misma fue concretada, pero registró dolor abdominal y fue intervenida nuevamente, ingresando en la Unidad de Terapia Intensiva con shock séptico, produciéndose su fallecimiento el día 14 de julio a las 10.48 de la mañana por un paro cardiorespiratorio.
