Marzo es un mes que la familia Castro no olvidará jamás. Conocidos por la actividad en su escuela de karate que los llevó a participar a otras provincias, de repente les cambió la vida por una tragedia. En la madrugada del 2 de marzo, una de sus integrantes, Melisa (23), iba de la mano de su novio caminando por la banquina de calle El Bosque y cerca de Zapata, una camioneta F-100 la arrancó de la mano del joven.
El impacto fue letal y murió en el lugar. Desesperados, tanto el novio de Melisa como el conductor de la camioneta, identificado como Emanuel Nievas (24), la subieron al vehículo y la llevaron al hospital, Nada pudo hacerse. El hombre fue detenido y liberado el pasado 11 de marzo e imputado por Homicidio culposo. De acuerdo a lo que declaró, metros antes del siniestro se abrió para no atropellar a un perro pero al cerrarse, en la maniobra atropelló a Melisa. No se dio cuenta que era una persona hasta que por el espejo retrovisor vio al novio de la chica agarrándose la cabeza.
A un mes del hecho, la familia de Melisa atraviesa días duros y una espera que los tiene en vilo. Es que con la cuarentena por coronavirus, la Justicia ha frenado su trabajo y no han tenido más novedades que la de la liberación de Nievas a quien no conocen. "No sabemos quién es. Ni siquiera le conocemos la cara; ni por los medios lo han mostrado. Tampoco se comunicó para decirnos nada. Es un interrogante para nosotros. La causa no avanza y no podemos saber quién es Nievas", dijo Marcelo Castro, papá de Melisa y conocido instructor de karate, a Diario La Provincia SJ.
Al dolor de la pérdida, ("nos llevó dos días darnos cuenta que Melisa había muerto", confesó) ahora están acostumbrándose a que la hija de la joven, de sólo 4 años, ya no vive con ellos. "El papá de mi nieta es legalmente responsable y se la llevó a vivir con él. Ellos están cerca pero no es lo mismo. Nos llamamos por teléfono, hacemos videollamadas pero no es igual. Ella nos ve y llora; se quiere venir. Imagínese que vive con nosotros desde que estaba en la panza de mi hija. Está muy triste por todo y nosotros estamos demasiado tristes: demasiado mal", dijo Marcelo.
Justamente este sábado, el papá de la pequeña la había llevado a ver a sus abuelos. "La extrañamos. Este ha sido un golpe inesperado. Hace 8 meses también perdimos un sobrino en un choque. Mi esposa ha estado tan mal. Por la familia, el papá de mi nieta es quien se ha presentado como parte en lo penal y nosotros haremos una demanda civil. Con esto de la cuaretena, no sabemos cuánto tendremos que esperar", señaló.
Por la misma situación de cuarentena, tampoco se pudo oficiar una misa por el alma de Melisa. "Hicimos una cadena de oración por WhatsApp el día que cumplía un mes de fallecida y se sumaron muchas personas. Nos sentimos acompañados en esto y sabemos que la justicia es muy lenta. Tenemos también el apoyo de Familias del Dolor y la Esperanza que se han contactado y esperamos estar un poco más enteros para participar con ellos. Al velorio, llegaron personas de San Luis y otras provincias donde habíamos competido con la escuela de karate. Todos ellos están con nosotros", resaltó.
La causa por la muerte de Melisa está en el Primer Juzgado Correccional y aún transita la etapa de instrucción. "Me gustaría conocerle la cara a Nievas para al menos saber si todavía maneja y advertirle a otros que es un peligro al volante", sentenció con dolor.