Vivieron un verdadero infierno. Estaban convencidos de que su hijo era inocente y mantuvieron esa postura hasta el final del juicio. Los padres de Amilcar Funes nunca bajaron los brazos en la lucha por justicia. Acompañaron a su hijo en el último día de audiencia y festejaron con prudencia la sentencia del juez Maximiliano Blejman: que el boxeador sea absuelto por el beneficio de la duda y que recupere de inmediato la libertad tras la imputación en el caso que se investigó el crimen de Sergio Montenegro.
“Nosotros como papás estamos pesimamente mal, porque andábamos cabizbajos por algo que no es, que a uno lo acusen siente hasta una vergüenza ajena por eso es que pedimos justicia a Dios, él conoce bien como han sido las cosas. Nuestro hijo no salió en toda la noche de su cumpleaños, ha estado festejando su cumpleaños, para colmo ese día”, expresó a Diario La Provincia SJ, Eleazar Funes, papá de Amilcar en la puerta de la Sala III de la Cámara Penal.
“Son casi tres años los que llevamos viviendo una incomodidad total por una injusticia, porque Amilcar solamente compró un teléfono y venía de una persona que habían asesinado y él no supo nunca, hasta lo llegó a usar y eso fue todo lo que lo involucró. Él es inocente de lo que se le acusaba”, agregó subrayando: "Dios es testigo de lo que ha habido y Dios es algo muy grande”.
A pesar del clima de tensión que se vivía en el hall de tribunales y en las afueras del mismo, los padres de Funes estaban tranquilos, incluso cuando se les preguntó sobre que esperaban en la sentencia, Eleazar no dudó ni un minuto. “La doctora Mónica Sefair ha presentado sus alegatos y ahí está toda la verdad”, aseguró en aquel momento.
"Se imagina cómo puede estar, ni conoce a la persona de cual lo acusan que lo ha matado. Es una bronca muy grande que tiene toda la familia. Tiene hijos que están sufriendo, son menores de edad, han cambiado de escuela los chicos, por los problemas que la acusación es falsa”, señaló Eleazar.