Violencia de género

Locutora sanjuanina agredida por su jefe, está enferma: "lo que la boca calla, el cuerpo lo grita"

La locutora contó que viene haciendo un tratamiento contra 10 nódulos que le aparecieron. "Todo se me dio a partir de lo que pasé en la radio", señaló.
miércoles, 25 de septiembre de 2019 18:40
miércoles, 25 de septiembre de 2019 18:40

No está bien. El dolor de lo ocurrido es más fuerte que el dolor físico. Claudia Vázquez, la locutora de Radio Bohemia que fue agredida al aire por su jefe, habló de la violencia de género que sufrió este martes al mediodía y confesó que una enfermedad la aqueja. "Lo que la boca calla, el cuerpo lo grita", expresó a la prensa nacional.

La locutora relató que tiene 10 nódulos que la aquejan y por su salud tuvo que faltar una sola vez al trabajo. "Con esta situación de mi enfermedad, todo se me dio a partir de lo que pasé en la radio", aseguró en TN sobre el hostigamiento que no es de ahora sino de hace tiempo. La locutora destacó que pese a eso, ama su trabajo y siempre se esmeró por hacerlo bien.

"Vivo de  mi gente, me gusta salir mucho a la calle y buscar anunciantes. Ayer mis hijos pasaron un mal momento. No soy la única que pasó esto, ellos también. No puedo entender cómo una persona que cree tener el poder de dos medios se permita hacer esto, no solo conmigo sino con otros profesionales, tanto hombres como mujeres, hostigamientos. Soy una persona muy cumplidora y responsable. Siempre digo que yo no vendo humo sino que vendo aire", destacó.

Vázquez aseguró que aportaba el 50% de casi todas sus publicidades a la radio y que se sintió "explotada en lo comercial". Además indicó que pese a las diferentes adversidades que le puso la vida, "siempre" pudo "salir adelante". "Hay que apoyar a la gente que labura, hago de mamá y papá. Nunca pasé por esto", agregó. 

La locutora no solo viene tratando su salud para combatir los nódulos sino que también es celiaca y su cuidado es muy intenso. Incluso a la radio "llevaba todas las mañanas" su equipo de mate, cafetera e incluso la tostadora. 

"Llegó él tiró la carpeta, tiró mate, yerba, azúcar, a los gritos, no sabía que pasaba, le pedía que dejara de gritar", relató rompiendo en llanto.

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