Para la Justicia, las pruebas de los peritos e investigadores revelaron que Diego Álvarez, principal sospechoso por el femicidio de la joven mamá Brenda Requena, actuó en el descampado en el que se hallaron los restos desmembrados, calcinados y enterrados.
El hombre había atacado a la joven en presencia de José Guajardo y cuando él se fue tras ser también agredido (hay una denuncia por la que se detuvo a Álvarez), la violencia no cesó. De acuerdo a las pericias, la estranguló y quiso deshacerse del cuerpo. Por ello, hizo viajes a su casa en busca de membrana para envolver los restos del cuerpo y calcinarlo.
En esas maniobras estaba cuando un grupo de niños que "trampeaba" pajaritos lo encontró cerca de hondonadas de donde salía humo negro. Había logrado juntar neumáticos y otros elementos inflamables para quemar los restos y borrar toda huella. Después, denunció la desaparición de Brenda y divulgó la hipótesis que estaba escondida o huido con su amante. Incluso que se había llevado dinero. Para el Fiscal, Carlos Rodríguez hay pruebas suficientes para que el juez determine un procesamiento del detenido, egún expresó a Canal 4.
Tras escuchar las pruebas, el juez del Cuarto Juzgado de Instrucción, Guillermo Adárvez lo imputó bajo la calificación de Homicidio Doblemente Agravado en perjuicio de Brenda. Los dos agravantes son el inciso 1 y 11 del artículo 80 que son por Convivencia y por Violencia de Género, que incluye el Femicidio. Además se suma Lesiones y Coacción en contra de José Guajardo.
Su abogado Marcelo Abarca Gómez destacó a Diario La Provincia SJ que le recomendó no declarar hoy. "Estamos definiendo la estrategia con Diego", señaló. Álvarez sigue en el Penal de Chimbas.
